La Policía de Río de Janeiro evitó un atentado con bomba durante el multitudinario concierto que la cantante Lady Gaga ofreció en la playa de Copacabana el sábado por la noche. El evento, que reunió a más de dos millones de personas, estuvo bajo un estricto operativo de seguridad con más de 5.000 agentes, drones y cámaras con reconocimiento facial.
Según un comunicado oficial publicado en la red social X, las autoridades brasileñas confirmaron la detención de dos personas involucradas en el intento de ataque: un adulto, señalado como el autor intelectual, y un adolescente, que habría sido el encargado de ejecutar el plan.
Los implicados fueron identificados como parte de una red que reclutaba personas a través de internet para realizar atentados con explosivos caseros y cócteles molotov, con el objetivo de ganar notoriedad en redes sociales.
De acuerdo con la policía, el autor intelectual difundía discursos de odio y planeaba ataques principalmente dirigidos contra niños, adolescentes y la comunidad LGBT+.
Durante la operación, denominada “Fake Monster” en referencia al álbum debut de Lady Gaga, se llevaron a cabo 15 allanamientos en distintos estados como Río de Janeiro, São Paulo y Mato Grosso.
El adulto fue arrestado en Rio Grande do Sul por posesión ilegal de armas, mientras que el menor fue detenido por almacenamiento de pornografía infantil. Hasta el momento, las identidades de los acusados no han sido reveladas.
El operativo de seguridad permitió que el concierto de Lady Gaga en Brasil 2025 se desarrollara sin incidentes, pese a la magnitud de la amenaza frustrada.
