En La Plata, el padre de Kim Gómez, la nena de 7 años asesinada durante un robo en febrero pasado, volvió a enfrentar su peor recuerdo: retirar el Fiat Palio rojo en el que su hija vivió sus últimos momentos. Marcos Gómez subió a Instagram una foto de su mano sosteniendo una botellita con la cara de Mickey Mouse —su última pertenencia— y escribió un mensaje cargado de emoción: pidió “la luz” de Kim para seguir adelante, prometió ser valiente como ella y confesó que aún llora en silencio.
La causa avanza. El adolescente de 14 años, considerado “no punible”, seguirá en un instituto de menores en La Plata bajo una medida excepcional impuesta por la Cámara de Casación, que rechazó el habeas corpus por considerar "extrema gravedad" el hecho y con el objetivo de un tratamiento integral. Por otro lado, la fiscal Carmen Ibarra pidió que el joven de 17 años sea elevado a juicio oral por homicidio agravado por el uso del vehículo en ocasión de robo; la jueza María José Lescano decidirá en los próximos días.
Qué pasó el 26 de febrero en Altos de San Lorenzo
La familia de Kim circulaba en un supermercado mayorista de 72 y 24, cuando los dos adolescentes subieron al auto tras robarlo a la mamá. Kim estaba en el asiento trasero, con cinturón de seguridad. Intentó escapar, pero fue impedida. El Palio recorrió más de 15 cuadras; en ese trayecto la nena cayó al pavimento, fue atropellada por el mismo coche y arrastrada, falleciendo en el acto.
El padre, ubicó esa botella con agua y Mickey en el compartimento: “Tiene tu agua, tus stickers… y ahora mis lágrimas”, escribió. Esa imagen ya se viralizó, con cientos de mensajes de consuelo desde Salta, Córdoba y todo el país. Además, hubo movilizaciones en La Plata exigendo más seguridad y cambios en el sistema que castiga a menores en hechos graves.