En un hecho impactante, dos chicos que jugaban en un área cercana al canal que contiene al arroyo del Rey en Ingeniero Budge, Lomas de Zamora, hallaron los restos descuartizados de un hombre dentro de una valija el pasado domingo por la tarde. La víctima fue identificada como Fernando “Lechuga” Pérez Algaba, un destacado empresario dedicado al alquiler de autos de alta gama, además de ser trader y haber sido piloto del TC Regional.
El empresario de 40 años había vivido en Miami hasta principios de este año y luego estuvo en España antes de regresar a la Argentina. Los jóvenes que encontraron los brazos y las piernas de Pérez Algaba dieron aviso a sus padres, quienes rápidamente alertaron a las autoridades.
Gracias a las huellas recolectadas por la Policía Científica y los tatuajes presentes en las extremidades, se logró identificar al hombre descuartizado. Los investigadores destacan la meticulosidad de los cortes, lo que sugiere que el crimen podría haber sido obra de un profesional.
Las autoridades también revelaron que Pérez Algaba había llegado recientemente al país desde España y alquiló un departamento en Ituzaingó. Sin embargo, durante los allanamientos realizados en su vivienda, no se encontraron ni su teléfono celular ni su billetera, ni ningún otro objeto de interés para la investigación. El caso está siendo llevado adelante por Marcelo Domínguez, de la UFI Nº 5 de Lomas de Zamora.
La pista de la valija encontrada en el lugar donde aparecieron los restos ha llevado a los investigadores a indagar sobre su procedencia. Dentro de la valija había documentación perteneciente a una familia, y se busca determinar si estas personas tienen algún tipo de conexión con el crimen. Aunque una mujer que había robado la valija fue detenida, aún no se ha confirmado su participación en el homicidio. Además, las autoridades solicitaron acceso a las cámaras de seguridad de la zona para buscar posibles sospechosos adicionales.
El trágico desenlace de Pérez Algaba contrasta con la fama que alcanzó el empresario en las redes sociales, donde contaba con una gran cantidad de seguidores, aproximadamente 916.000. En su perfil, solía compartir imágenes y videos de lujosos autos de alta gama, como Porsche y Audi descapotables, así como motos de agua y vehículos para subir médanos en las playas. También era común ver fotos de fiestas y entrenamientos en el gimnasio, acompañado de sus queridos perros de raza Bulldog Francés. El hombre, además, enfrentaba problemas legales debido a su reiterada imprudencia al volante, con multas principalmente por exceso de velocidad.