La investigación por la muerte del excomisario Vicente Cordeyro, ocurrida en su casa de San Lorenzo, sumó un dato inesperado que reavivó la polémica: se confirmó que una de sus hijas mantuvo una relación con Adrián Guillermo Saavedra, uno de los acusados por el femicidio de Jimena Salas, y fruto de ese vínculo nació una hija.
El vínculo fue reconocido oficialmente por el Ministerio Público Fiscal, en el marco de una resolución que dispuso importantes cambios en la causa. El fiscal penal Gabriel González, quien integraba el equipo que investigaba la muerte de Cordeyro, fue apartado a pedido propio. Su salida se debe a que también forma parte de la acusación contra los hermanos Saavedra en el juicio por el crimen de Salas, ocurrido en Vaqueros en 2017.
Ante esta situación, el Procurador General de la Provincia ordenó la conformación de una Unidad Fiscal especializada, que quedó integrada por los fiscales Santiago López Soto y Daniel Espilocín, bajo la coordinación del fiscal de Impugnación Ramiro Ramos Ossorio.
El objetivo es garantizar imparcialidad y evitar cualquier sospecha sobre el manejo del caso. Se invocó el artículo 77 del Código Procesal Penal, que contempla el apartamiento de funcionarios en situaciones que puedan afectar la objetividad de una causa o generar desconfianza pública.
La figura de Vicente Cordeyro, exjefe de Investigaciones de la Policía de Salta, estuvo siempre ligada a causas complejas y de alto perfil. Su muerte, en circunstancias que aún no fueron del todo esclarecidas, generó conmoción dentro y fuera del ámbito policial. El dato de su vínculo familiar con uno de los imputados en el caso Salas agrega tensión a un expediente que ya estaba en la mira.
El femicidio de Jimena Salas fue uno de los crímenes más resonantes de la última década en la provincia. El proceso judicial contra los hermanos Saavedra está en curso, pero desde sus inicios estuvo marcado por demoras, cambios de fiscales e inconsistencias en la acusación. En ese contexto, la relación entre el entorno de Cordeyro y uno de los acusados no pasó desapercibida.
Con este nuevo escenario, las autoridades buscan encarrilar la investigación sobre la muerte del excomisario sin interferencias ni ruidos políticos o personales. La creación de la nueva Unidad Fiscal apunta a transparentar el proceso y devolverle credibilidad a una causa que podría tener derivaciones aún más profundas.