El fiscal penal 2 de la Unidad de Delitos Contra la Integridad Sexual (UDIS), Rodrigo González Miralpeix, representó al Ministerio Público Fiscal ante la Sala I del Tribunal de Juicio del Distrito Centro, en la audiencia de juicio abreviado seguida contra un hombre de 42 años, acusado del delito de abuso sexual simple, agravado por el vínculo, la guarda y la convivencia preexistente.
En octubre de 2022, la expareja del acusado denunció que la hija menor que tienen en común, le había contado que se sentía incómoda cuando él llegaba a la casa, se le tiraba encima y hacía que se sentara en su pierna.
En declaración testimonial, mediante Circuito Cerrado de Televisión (CCTV), la niña expresó que estos hechos sucedieron cuando ella tenía 9 años y que su papá además, la sometía a tocamientos.
En el requerimiento a juicio, el fiscal González Miralpeix sostiene que el hecho resulta agravado, dada la convivencia preexistente entre las partes, en virtud de la relación de pareja que el acusado mantenía con la progenitora de la menor y del vínculo paterno que lo unía a la niña. Concluye que dicha situación facilitó el accionar del imputado, haciendo caso omiso a los deberes de cuidado que se le exigen.
El juez Martín Pérez, luego de recibir la confesión del acusado, lo condenó a la pena de tres años de prisión, de cumplimiento condicional y le impuso el cumplimiento de reglas de conducta, además de la obligación de someterse a tratamiento psicológico.