"Con la fuerza del interior". Con ese eslógan el gobernador de Tucumán Juan Manzur empezó a delinear lo que es su estrategia para ir a las PASO 2023 y enfrentar a los candidatos que ponga el kirchnerismo y el albertismo. El mandatario cree que hay margen para una candidatura de gobernadores que desafíe los límites impuestos por la provincia de Buenos Aires y la Ciudad.
Su postulación tiene el apoyo de algunos mandatarios del norte del país. El más explícito en las últimas horas fue el de Sergio Uñac, gobernador de San Juan, que se mostró con Manzur aunque aclaró que no habrá por ahí una fórmula conjunta.
La precandidatura de Manzur es vista además con buenos ojos por algunos sectores del kirchnerismo. Creen que de esa manera se dividirá el voto del peronismo tradicional, lo que dispersará el caudal electoral de Daniel Scioli, hoy única opción formalmente lanzada del peronismo no K.
Manzur además exhibe apoyos de sectores de la CGT. Hace unos días se reunió en Tucumán con Héctor Daer, cotitular de la central obrera, que también está disgustado con las opciones que hoy aparecen en el panorama electoral de Unión por la Patria.
Manzur por ahora no levanta en las encuestas. Pero creen que pueden traccionar el voto del interior, si es que recibe el apoyo del resto de sus colegas. O al menos hacer un papel digno que lo levante en el escenario nacional pensando en 2027.
Algunos dirigentes nacionales como Wado de Pedro o el propio Scioli dejan correr que les gustaría que Manzur fuera su vicepresidente. Pero el tucumano por ahora no se baja. Y está dispuesto a seguir hasta las últimas consecuencias.
