Un total de 1.900 efectivos del Ejército Argentino fueron desplegados en Tartagal, como parte de la ampliación del Plan Güemes y de la Operación Julio Argentino Roca. El operativo, impulsado por el Ministerio de Defensa de la Nación, busca reforzar los controles fronterizos en el norte de Salta, especialmente en la lucha contra el narcotráfico y el contrabando.
Este importante desembarco militar se enmarca dentro de una estrategia nacional más amplia que comenzó en diciembre pasado con la implementación del Plan Güemes en Orán. Ahora, con la extensión del operativo, también se cubrirán los departamentos San Martín y Rivadavia, zonas clave por su cercanía a la frontera con Bolivia.
Desde el Gobierno de Salta destacaron que la llegada de las tropas tiene como objetivo complementar el trabajo de las fuerzas federales y provinciales. Además, apunta a reforzar la vigilancia en los pasos fronterizos, muchos de los cuales presentan debilidades históricas ante el ingreso ilegal de personas y mercadería.
El secretario de Seguridad de la provincia, Nicolás Avellaneda, explicó que el Ejército cumplirá funciones de apoyo, pero que también está autorizado a intervenir directamente en caso de detectar delitos como narcotráfico o contrabando.
"Se está dando un golpe muy fuerte al narcotráfico. Todos los delitos vinculados a la narcocriminalidad disminuyeron en este primer cuatrimestre", señaló Avellaneda en una entrevista con los colegas de FM Aries.
Con este despliegue, el Gobierno nacional busca establecer controles más rigurosos y sostenidos en una de las zonas más sensibles del país en materia de seguridad y crimen organizado.