Los jubilados argentinos vuelven a mirar con atención el calendario económico: el próximo 14 de octubre, el INDEC publicará el dato de inflación de septiembre, número que servirá para determinar el nuevo aumento de haberes que regirá desde noviembre. La cifra llega en un contexto de desaceleración de precios, pero con la expectativa de que los ingresos previsionales no pierdan poder de compra.
Durante esta semana, la Dirección de Estadísticas de la Ciudad de Buenos Aires adelantó un aumento del 2,2% en los precios porteños, dato que suele anticipar la tendencia del índice nacional.
Si el informe del INDEC confirma una variación similar, los jubilados recibirían un ajuste cercano al 2%, aplicable según la fórmula de movilidad por inflación vigente desde el Decreto 274/2024, que toma como referencia los precios de dos meses atrás.
¿De cuánto sería el aumento en noviembre?
Con ese cálculo, el haber mínimo, hoy en $326.266,35, pasaría a rondar los $333.000. Si el Gobierno mantiene el bono de $70.000, como se viene otorgando desde mitad de año, el ingreso total superaría los $403.000 mensuales.
Aunque todavía no hay confirmación oficial, en el entorno de la Casa Rosada aseguran que Javier Milei mantendría el refuerzo económico, al menos hasta fin de año, con el objetivo de sostener el poder adquisitivo de los más de 5 millones de jubilados y pensionados que dependen del sistema previsional nacional.
El calendario de pagos de ANSES prevé que el incremento y el bono se acrediten a partir del 10 de noviembre, junto con los haberes regulares.
Así, el anuncio del 14 de octubre será determinante no solo para conocer la inflación de septiembre, sino también para definir de cuánto será el próximo aumento que impactará directamente en los bolsillos de los jubilados.