Salta estrenó este lunes 15 de diciembre de 2025 un renovado equipo de gestión provincial, con la asunción de nuevos ministros, secretarios y la subsecretaria de Vocería y Comunicación, en un acto encabezado por el gobernador Gustavo Sáenz en la histórica Casa de Gobierno. El mandatario aseguró que “Salta es y será la perla del norte argentino”, reafirmando su compromiso con el desarrollo provincial y el federalismo efectivo.
Durante la ceremonia, Sáenz tomó juramento a Sergio Camacho como jefe de Gabinete de Ministros, y a los titulares de las carteras de Gobierno y Justicia, Ignacio Jarsún, y de Producción y Minería, José Ignacio Lupión. Además, asumieron Oriana Névora como secretaria de Gobierno; Javier Mónico Graciano, en Justicia; y Gustavo Carrizo, en Minería. La subsecretaria de Vocería y Comunicación, Ana Paula Benavides, también fue puesta en funciones por el mandatario provincial.
El gobernador destacó que la nueva estructura del Gabinete responde a la implementación de la Ley N° 8511 de Ministerios, que busca “achicar el Estado, hacerlo más eficaz y más ejecutivo”. Subrayó la importancia de un gobierno cercano a la ciudadanía y señaló que la composición del equipo refleja un verdadero federalismo, con hombres y mujeres del interior de la provincia trabajando junto a intendentes, legisladores y funcionarios locales.
“Hoy es un día de balance, para evaluar cómo nos fue, qué nos faltó y qué necesitamos. Luego de seis años de gestión, con desafíos constantes, pusimos todo nuestro esfuerzo, con compromiso, trabajando para cada uno de los salteños”, expresó Sáenz. También agradeció a los ministros salientes por su labor, destacando que las políticas implementadas en sus carteras “dejaron huellas” que seguirán marcando la gestión provincial.
En su discurso, el gobernador no solo se centró en la provincia, sino que también se refirió al contexto nacional, criticando la polarización política y la falta de consenso: “En un país destrozado por el discurso del odio, con retóricas fundamentalistas de un lado y del otro, en el medio están los argentinos esperando que nos pongamos de acuerdo”. Invitó a todos los sectores políticos a pensar en el futuro de las próximas generaciones y no en las próximas elecciones, fomentando una política de mediano y largo plazo.
Sáenz destacó además que la provincia seguirá reclamando con firmeza lo que le corresponde desde el centro del país, sin pedir limosna. “No necesitamos que nos den nada; lo único que necesitamos es una mirada federal. Solo es mirar hacia el norte. Los salteños vamos a pelear por lo que nos corresponde”, enfatizó.
El acto contó con la presencia del vicegobernador Antonio Marocco, el vicepresidente de la Cámara de Senadores, Mashur Lapad, y el presidente de la Cámara de Diputados, Esteban Amat, así como de la presidenta de la Corte de Justicia de Salta, Teresa Ovejero. También asistieron intendentes, ministros, legisladores y demás funcionarios provinciales, consolidando un marco institucional amplio para la asunción del nuevo equipo.
El nuevo gabinete provincial tendrá la responsabilidad de implementar políticas clave en distintas áreas estratégicas, desde la producción y minería hasta la justicia y la comunicación institucional. La cercanía con la ciudadanía será uno de los ejes de gestión, con el objetivo de reforzar la presencia del Estado en todos los rincones de Salta.
Con este recambio, el gobierno provincial busca no solo optimizar la administración pública, sino también fortalecer los lazos con las distintas localidades del interior y fomentar un desarrollo equilibrado en todo el territorio provincial. Sáenz insistió en que la meta es dejar un legado duradero: “Somos fugaces, pero tenemos la obligación de dejar huellas trascendentes para Salta y el norte argentino”.
En resumen, la ceremonia marcó un punto de partida para una gestión enfocada en eficiencia, cercanía y federalismo. El gobernador Sáenz ratificó su visión de un Salta pujante, autónomo y con protagonismo en el norte argentino, comprometido con la justicia social, la producción provincial y la integración territorial, en un momento donde la provincia busca consolidar su identidad y crecimiento sostenido dentro del país.