El Mercado San Miguel, uno de los íconos más reconocidos de la ciudad de Salta, sigue adelante con su proceso de modernización. Las obras de renovación, que se concentran en el sector de calle Urquiza y en el entrepiso que da a calle Ituzaingó, avanzan con la construcción de pilotes y pozos romanos que se convertirán en los nuevos cimientos del edificio.
En las últimas semanas se completó el levantamiento del suelo en el entrepiso de Ituzaingó, una tarea clave para preparar el espacio y dar inicio a la extracción de los antiguos arcos de hierro que sostenían el techo del mercado. Estos trabajos no solo buscan reforzar la estructura, sino también recuperar un lugar histórico que forma parte de la vida cotidiana de miles de salteños.
En paralelo, sobre calle Urquiza se ejecutan los 112 pozos romanos que, junto a los pilotes, garantizarán bases profundas y sólidas para la construcción. Este sistema de cimentación permite que el nuevo edificio adquiera mayor resistencia y seguridad, aspectos fundamentales en una zona donde la circulación de personas es constante.
La renovación del Mercado San Miguel representa una de las intervenciones urbanas más importantes en el microcentro salteño en los últimos años. El tradicional espacio, que desde hace más de ocho décadas es punto de encuentro para vecinos y turistas, combina la venta de alimentos frescos, artesanías, productos regionales y una variada oferta gastronómica. Por eso, las obras generan una expectativa especial en comerciantes, clientes y transeúntes que lo reconocen como parte de la identidad de la ciudad.
El plan de modernización busca preservar el espíritu histórico del edificio mientras se incorporan mejoras estructurales y de infraestructura que permitirán un funcionamiento más cómodo y seguro. La tarea no es menor: se trata de intervenir un espacio que continúa en actividad, lo que obliga a diagramar los trabajos sin interrumpir la atención al público.
Pese a la magnitud de la obra, el mercado sigue abierto en su horario habitual, de 8 a 14 y de 17 a 21:30. Los ingresos habilitados son por calle Florida y avenida San Martín, donde se organizó la circulación para que vecinos y turistas puedan realizar sus compras sin mayores inconvenientes.
El Mercado San Miguel no solo es un edificio emblemático del casco céntrico; es también un espacio de fuerte arraigo cultural. En sus pasillos se entremezclan historias de familias que hace generaciones trabajan en los puestos, compradores fieles que lo eligen por su cercanía y precios accesibles, y visitantes que llegan en busca de un paseo típico de Salta.
Las obras en curso buscan reforzar ese rol, modernizando el lugar sin perder la esencia que lo distingue. La incorporación de bases más resistentes permitirá pensar en un mercado renovado que se proyecte hacia el futuro sin dejar de lado su historia.
La transformación de este espacio se suma a otras intervenciones en el casco céntrico que apuntan a revalorizar el patrimonio urbano y mejorar la infraestructura de servicios. Con la mirada puesta en la seguridad estructural y en la preservación de la identidad cultural, la remodelación del Mercado San Miguel avanza a paso firme, acompañada por la expectativa de toda la comunidad salteña.
