Sol Pérez vive uno de los momentos más transformadores de su vida. Este lunes, la panelista de Cortá por Lozano (Telefe) presentó por primera vez en televisión a su hijo Marco, fruto de su relación con Guido Mazzoni. La aparición del bebé en el programa no solo enterneció a sus compañeros y al público, sino que también sirvió como excusa para que Sol compartiera cómo cambió su vida desde que se convirtió en madre.
“Ser mamá es un sueño. Siempre lo quise y ahora que lo tengo, siento que el mundo perdió todo interés. Todo mi foco está puesto en él”, confesó emocionada. Durante la entrevista, Marco se mostró inquieto, y Sol, con ternura, explicó que ya reconoce sus señales: “Se le ponen los ojitos rojos y ya sé que quiere dormir. Es su forma de decirme ‘mamá, ya está’”.
La modelo también habló con sinceridad sobre el impacto físico y emocional del postparto. “El primer mes fue durísimo. No salía de casa, estaba todo el día amamantando. Era una teta con pantuflas. Horrible. Todo el día en pijama, con los pelos revueltos y el vómito del nene encima”, relató entre risas, pero con honestidad brutal.
En ese contexto, Sol reveló por qué decidió suspender su estricta rutina de entrenamiento, una parte esencial de su vida antes de ser madre. “Marco tenía un mes y yo estaba desesperada. Le dije a Guido que necesitaba volver a hacer algo porque me estaba muriendo. Empecé a entrenar en casa, con el visto bueno de mi obstetra, que me dijo que escuchara a mi cuerpo”, explicó.
Sin embargo, con el regreso al trabajo y la demanda de la maternidad, Sol optó por pausar nuevamente su entrenamiento. “Ahora dejé porque estoy empezando a trabajar otra vez. Cuando pueda, voy a volver. Pero hoy mi prioridad es Marco”, afirmó.
La influencer también se refirió a las críticas que recibió por haber retomado el ejercicio tan pronto: “Obvio que no iba a hacer nada que lastimara al bebé. Solo necesitaba sentirme un poco yo otra vez”.
Con su bebé en brazos y una sonrisa que no disimulaba el cansancio, Sol dejó en claro que está atravesando una etapa única. “Estoy enamorada. Es un gordo pipón y no puede más de lo bueno. No sé a quién salió, porque nosotros somos un desastre”, bromeó.
