Tras su reciente separación del productor Claudio “Peluca” Brusca, Laurita Fernández ha comenzado una nueva etapa en su vida marcada por la introspección, el crecimiento personal y la reafirmación de sus deseos más profundos. En medio de rumores sobre posibles nuevos romances y una intensa actividad profesional, la actriz y conductora argentina sorprendió al abrir su corazón y compartir públicamente uno de sus anhelos más íntimos: el deseo de ser madre y formar una familia.
La ruptura con Brusca, tras casi tres años de relación, fue dolorosa pero necesaria, según confesó Laurita. A pesar de la tristeza que conlleva cerrar un capítulo importante, la artista ha demostrado una notable fortaleza emocional. En diversas entrevistas y publicaciones en redes sociales, ha manifestado que este momento de soltería le ha permitido reconectar consigo misma, enfocarse en su carrera y reflexionar sobre sus prioridades. Fue en este contexto que decidió tomar una decisión trascendental: congelar sus óvulos como una forma de preservar su fertilidad y mantener abierta la posibilidad de ser madre en el futuro.
El proceso, que realizó de manera privada y reservada, implicó un tratamiento médico de aproximadamente 10 a 12 días, durante el cual Laurita debió aplicarse inyecciones diarias y evitar actividades físicas intensas. A pesar de los desafíos, la actriz lo vivió como una experiencia liberadora y enriquecedora. “Me encantaría, obviamente, ser madre, me encantaría formar una familia”, expresó con emoción, destacando que esta decisión le brindó tranquilidad y libertad para elegir cuándo y cómo encarar la maternidad.
