El US Open 2025 vive una jornada histórica con la final entre Carlos Alcaraz y Jannik Sinner, dos jóvenes que se disputan mucho más que un título: el trono del número uno del mundo y la supremacía de la nueva rivalidad que marca el tenis mundial.
En el imponente escenario de Flushing Meadows, el español comenzó con todo y se llevó el primer parcial por 6-2. El italiano reaccionó rápido y empató el marcador con un 6-3 en el segundo set. Sin embargo, Alcaraz volvió a golpear en el tercero y se puso 2-1 arriba, en una final vibrante que atrapa al público neoyorquino y a millones de fanáticos alrededor del planeta.
El duelo tiene un tinte histórico: es la primera vez en la Era Abierta que dos jugadores disputan tres finales de Grand Slam en una misma temporada. A sus 22 y 24 años, Alcaraz y Sinner lograron algo que parecía impensado hace apenas un par de temporadas: dejar sin protagonismo a figuras tradicionales y monopolizar los títulos grandes en 2024 y 2025.
La estadística favorece levemente al murciano, que ya cuenta con cinco trofeos de Grand Slam, uno más que el italiano. Esta final puede equilibrar la balanza o ampliar la diferencia, en un contexto donde cada punto se juega como si fuese decisivo.
Además, el partido reparte el liderazgo del ranking ATP: Sinner llegó a Nueva York como número uno desde junio, pero Alcaraz tiene la chance de destronarlo en el estadio más emblemático del tenis estadounidense.
La definición, transmitida en Argentina por ESPN y Disney+, también tuvo un condimento político: la presencia de Donald Trump en la tribuna principal. El republicano se convirtió en el primer presidente estadounidense en ejercicio en asistir a una final en Flushing Meadows desde Bill Clinton en el año 2000.
Con el planeta tenis como testigo, Nueva York es escenario de un choque que ya se escribe en la historia como el inicio de una era que busca suceder al legendario “Big 3”.
