Mientras las altas temperaturas continúan, las personas buscan adaptarse como pueden para no sufrir este calor que no solo saca energía, sino que no da ganas de hacer nada. Para estos días, si preparar la comida te está siendo difícil, tené a mano estas diez recetas que son muy frescas tanto para el almuerzo como para la cena, ideales para sobrevivir a las jornadas calurosas.
Se trata de diez opciones superfáciles que no incluyen horno, ya que el uso del mismo suele desplegar el calor por toda la casa. En verano, hacer recetas de este tipo es una de las claves para mantenerse frescos, sin sentir sensación de pesadez en el cuerpo ni agotarse en el intento.
En esta oportunidad, estas diez opciones de platos son excelentes para comer en casa e incluso para transportar al trabajo o a cualquier parte. Se hacen con ingredientes que seguro están en el hogar, o que, en todo caso, se encuentran todas las góndolas de comercios y supermercados. ¡Tomá nota!
Las 10 recetas perfectas para el calor: opciones frescas y fáciles de hacer en casa
1) Ensalada de pollo desmenuzado con lechuga, tomate, zanahoria rallada, huevo, palta y una vinagreta de limón y mostaza.
2) Sanguche de atún en pan integral. Se le puede sumar cebolla morada y tomate en rodajas, lechuga fresca, queso crema, mayonesa o yogur griego para hacerlo más cremoso.
3) Ensalada caprese. Se hace con cubos de queso o muzarella fresca, hojas de albahaca, tomate cortado en cubos pequeños y un toque de aceite de oliva y balsámico. Un clásico que nunca falla.
4) Bol de quinoa con vegetales, un plato sencillo cuya única dificultad es lavar bien la quinoa hasta que el líquido no salga más oscuro y luego hervirla. En un bol, mezclar con pepino picado, zanahoria rallada, tomate, palta, limón y un toque de aceite de oliva.
5) Wrap de verduras y hummus, una opción que sale deliciosa con cualquier relleno, pero que en esta ocasión lleva hummus de garbanzos, zanahorias cortadas en láminas, pepino cortado en bastoncitos, espinaca fresca y un toque de limón. Se le puede agregar pollo, queso fresco, jamón o alguna otra proteína.
6) Ensalada de pasta fría. ¿La probaste? Hay que cocer la pasta, dejarla enfríar y luego llevarla a un bol. Ahí, sumar tomate, pepino cortado en cubos pequeños, aceitunas, queso feta y una pizca de oliva. El tip para que quede irresistible es agregarle sal y pimienta.
7) Tostadas con palta y huevo duro. En este caso, se puede desayunar, almorzar, merendar o cenar esta alternativa que llena de energía y no deja el estómago pesado. Consiste en tostar pan integral y untarle palta, agregar huevo duro picado, sal, pimienta y un chorrito de aceite de oliva. Ideal para una comida ligera y deliciosa.
8) Ensalada griega, una receta fresca, colorida y muy popular, especialmente en Grecia. Los ingredientes que lleva son los siguientes: tomate cortado en cubos, pepino cortado en rodajas finas, cebolla cruda en rodajas, aceitunas negras, algún queso duro o semiduro cortado en cubos, orégano, aceite, sal y pimienta.
9) Ensalada de lentejas frías, una pavada que queda deliciosa con cebolla morada, morrón picado y rehogado, zanahoria rallada, tomate cortado bien pequeño y huevo duro. También, es exquisita con remolacha hervida, huevo duro y zanahoria rallada.
10) Tomate relleno, la opción navideña que debería comerse durante todo el verano. Son súper frescos y fáciles de hacer, con un relleno de queso crema, ricota, pesto, aceituna y albahaca.
Receta para el verano: tomates rellenos de queso y pesto
Ingredientes:
4 tomates grandes y firmes
100 g de queso crema o queso ricota
2 cucharadas de pesto
Unas hojas de albahaca fresca
Sal y pimienta al gusto
Aceite de oliva
Paso a paso:
- Lavá bien los tomates. Cortá la parte superior de cada tomate (como si fuera una "tapa") y con una cucharita, extraé las semillas y la pulpa, dejando una "cáscara" de tomate vacía. Reserva la pulpa para otro uso o simplemente descártala.
- En un bol, mezclá el queso crema o ricota con las cucharadas de pesto. Agregá un toque de sal y pimienta al gusto e integrá bien hasta obtener una crema homogénea.
- Picá finamente unas hojas de albahaca y sumalas a la mezcla de queso y pesto. Esto le dará más frescura y aroma.
- Con la mezcla de queso y pesto, rellená cada tomate con la ayuda de una cuchara. Asegurate de que queden bien llenos, pero no que sobresalgan demasiado.
- Colocá los tomates rellenos en un plato. Si lo deseas, podés sumarles un poco de aceite de oliva para darles un toque extra de sabor.
- Decorá con algunas hojas de albahaca fresca encima y ¡listo!
