Una forma muy sencilla de preparar pechugas de pollo y que queden sabrosas y jugosas es combinándolas con uno de los aderezos más perfumados de la cocina italiana: el pesto. Se hacen por completo en el horno, acompañadas con puré, papas o batatas, arroz e incluso fideos.
La receta es de la blogger italiana Stella Drivas.
Necesitamos:
- 2 pechugas de pollo sin piel ni hueso cortadas en bastones gruesos ( 3 cm de ancho)
- 1 planta de albahaca ( aprox. una taza llena de hojas)
- 2 dientes de ajo
- 40 g de manteca
- 1 chorro de aceite
- sal y pimienta
- queso rallado 4 cdas.
Vamos a utilizar una fuente para horno y papel aluminio.
En una procesadora, picar la albahaca y el ajo con un chorro de aceite ( si hay de oliva, mejor) hasta formar una pasta fluida. Condimentar con una pizca de sal y pimienta a gusto.
Poner un poco de la mezcka en la base de la fuente y porencima las pechugas cortadas, salpimentarlas y cubrirlas con el resto del pesto y distribuirles unos daditos de manteca. Tapar con papel aluminio y cocinar en horno precalentado a 180°C unos 20 minutos.
Retirar del horno, esparcir el queso rallado por encima del pollo y volver al horno destapado unos 10 minutos más para que gratine el queso.
¡Ya están listas para servir las pechuguitas al pesto!