Una larga columna de camiones aguardaba este domingo en el lado egipcio del paso de Rafah, lista para ingresar a la Franja de Gaza. La escena marcó el inicio del ingreso masivo de ayuda humanitaria tras el alto el fuego alcanzado entre Israel y Hamás, que entró en vigor el viernes al mediodía.
Según el canal egipcio Al Qahera News, unos 400 camiones de la Media Luna Roja egipcia cruzaron la frontera hacia los pasos de Kerem Shalom y Al Awja, los únicos habilitados por Israel para la entrada de suministros. A ellos se sumaron decenas de vehículos de organizaciones internacionales como el Programa Mundial de Alimentos de la ONU y varias cisternas con combustible.
El flujo de asistencia —el mayor desde el inicio de la crisis— forma parte del acuerdo que prevé la entrada diaria de hasta 600 camiones con ayuda, coordinados por la ONU, ONG autorizadas y países donantes. En paralelo, Egipto informó que más de cinco kilómetros de vehículos esperan turno en Rafah para acceder al enclave palestino.
Pese a este avance, las agencias humanitarias advirtieron que la ayuda sigue siendo insuficiente frente a las necesidades de 2,1 millones de gazatíes, muchos en situación de hambruna. “Estos camiones están muy lejos de cubrir lo necesario”, advirtió James Elder, portavoz de Unicef, mientras que Oxfam pidió garantizar un “flujo constante” de suministros.
Organizaciones como la ONU y la UNRWA también reclamaron a Israel que abra más pasos fronterizos y simplifique los controles militares para acelerar el ingreso de víveres. Actualmente, los camiones deben atravesar largas inspecciones que demoran el proceso y reducen el volumen de carga autorizado.
En paralelo, el Gobierno israelí mantiene cerrados otros cruces en el norte de la Franja, lo que dificulta la distribución en las zonas más devastadas por la ofensiva. Según la UNRWA, antes del conflicto Gaza recibía un número similar de camiones, pero contaba con infraestructura agrícola y pesquera que hoy está destruida en un 95%.
El alto el fuego, alcanzado bajo mediación egipcia y respaldado por Estados Unidos, también establece que Hamás liberará a los rehenes israelíes vivos en un plazo de tres días, una entrega prevista para el lunes.