En la última sesión del Concejo Deliberante de Rosario de la Frontera, la comisión de Juicio Político llevó a cabo una reunión en la que se discutió la falta de respuesta por parte del Ejecutivo municipal a los múltiples pedidos de informe realizados desde el año pasado. El concejal Raúl Figueroa expresó que nunca han recibido respuestas serias y en algunos casos las respuestas han sido ambiguas.
La comisión de Disciplina y Juicio Político, compuesta por siete ediles representantes de cada bloque, decidió presentar una acusación formal contra el intendente Gustavo Solís. Según Figueroa, se le otorgarán quince días al intendente para presentar pruebas o datos que respondan a las acusaciones.
Entre los pedidos de informe que no han recibido respuesta se encuentran los informes de la ejecución presupuestaria trimestral, así como la cuenta general del ejercicio del año 2021. También se mencionó la solicitud del organigrama del personal municipal y un informe sobre el personal que trabaja en condiciones insalubres en la recolección de basura.
La comisión anunció también que notificará formalmente al intendente Solís a través de una nota, dándole quince días para presentar sus pruebas. Durante este periodo, el Concejo Deliberante estará disponible para recibir cualquier documentación relevante. Si no hay una respuesta satisfactoria, se podrían iniciar otros procesos establecidos en la Carta Orgánica Municipal, incluyendo la posibilidad de un pedido de destitución del intendente.
