A pocas horas de una nueva jornada electoral en Argentina, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner volvió al centro de la escena con un mensaje directo y cargado de críticas hacia el presidente Javier Milei. La publicación, difundida este jueves a través de sus redes sociales, encendió la discusión política y dejó fuertes definiciones en un contexto social y económico cada vez más caldeado, especialmente en provincias como Salta, donde el impacto de las decisiones nacionales se siente con fuerza.
En el inicio del video, Kirchner se refirió con visible indignación al acto político realizado en la localidad bonaerense de Moreno, donde Milei, acompañado de su militancia, entonó canciones que aludían a la figura del expresidente Néstor Kirchner. La frase “saquen al pingüino del cajón”, coreada por el público y replicada en redes sociales, fue el eje de las críticas. Según la exmandataria, lo ocurrido no fue solo un acto de mal gusto, sino una expresión de “cobardía” y “miseria humana”.
“El espectáculo de un presidente desaforado, festejando la muerte de un oponente político, no solo es cobarde, sino indigno del cargo que ocupa”, sentenció Cristina. La expresidenta no ahorró en calificativos y aseguró que quien se burla del dolor ajeno no tiene lugar en la conducción del país. En una provincia como Salta, con una fuerte tradición de respeto por los muertos y la memoria histórica, ese tipo de actitudes no suelen ser bien recibidas, más allá de las afinidades partidarias.
La crítica no se limitó al episodio en Moreno. Kirchner también abordó el escándalo por los audios filtrados que involucran a Karina Milei, hermana del presidente, en presuntas irregularidades vinculadas a la gestión de fondos para personas con discapacidad. “El propio abogado de Milei, al que él mismo nombró en la Agencia Nacional de Discapacidad, fue quien detalló las maniobras. No fue la oposición, fue alguien de su círculo íntimo”, subrayó.
En ese sentido, la expresidenta acusó a Milei de tener “cara de piedra” por negar los hechos y culpar a los adversarios políticos. La comparación con el histórico boxeador panameño “Mano de Piedra” Durán fue lapidaria: “A este presidente deberían llamarlo ‘Cara de Piedra Milei’”.
El mensaje de Cristina también incluyó una referencia personal al atentado que sufrió en 2022, recordando que, a diferencia del actual mandatario, ella no utiliza ese episodio como argumento político. “Jamás hice mención en mis intervenciones públicas sobre ese hecho, porque es una experiencia traumática. Solo alguien que no lo vivió puede usar el ridículo de esa manera”, afirmó.
En el tramo final, la exjefa de Estado llamó a los ciudadanos a participar de las elecciones del domingo 7 de septiembre, asegurando que el voto es la única herramienta para “ponerle un freno a tanto insulto, agravio y desatino”. Desde su lugar, pidió explícitamente apoyar a la boleta de Fuerza Patria, fuerza que busca consolidar su presencia en distintas provincias, incluida Salta, donde se presenta como una alternativa frente al avance de los sectores libertarios.
El mensaje resonó especialmente en el norte del país, donde las políticas de ajuste del gobierno nacional han generado malestar. En Salta, donde el impacto del recorte de subsidios al transporte, la eliminación del Fondo de Incentivo Docente y la paralización de obras públicas generó protestas multisectoriales, el clima electoral se vive con una mezcla de bronca y expectativa. Las organizaciones sociales, los gremios docentes y los movimientos peronistas locales vienen denunciando el “abandono” de la Nación, y el llamado de Cristina puede terminar de movilizar a un electorado que aún no tiene decidido su voto.
A pesar de no ocupar un cargo formal, la expresidenta conserva un núcleo duro de apoyo que sigue siendo influyente, sobre todo en sectores populares y en regiones históricamente vinculadas al peronismo. En la provincia de Salta, donde la militancia peronista mantiene estructuras activas en distintos municipios, el mensaje de Cristina fue compartido en redes, cadenas de WhatsApp y reuniones partidarias, con el objetivo de revertir la apatía electoral que se percibe en algunos sectores.
No obstante, no todos en el peronismo salteño coinciden en que el camino sea el respaldo a Fuerza Patria. Algunos sectores aún responden a referentes locales con agendas propias, mientras que otros se muestran reacios a nacionalizar el debate. Pero más allá de las internas, el denominador común es el rechazo a las políticas de Milei, que vienen afectando duramente al entramado productivo y social de la región.
El domingo será una prueba clave no solo para el oficialismo nacional, que busca consolidar su proyecto económico ultraliberal, sino también para la oposición, que intenta recuperar protagonismo en un escenario de crisis y polarización. El llamado de Cristina Kirchner apunta a reforzar ese segundo bloque, con un mensaje que mezcla indignación, memoria histórica y un fuerte componente emocional.
En una campaña donde las redes sociales reemplazaron a los actos masivos y las operaciones mediáticas pesan tanto como los proyectos concretos, las palabras de la exmandataria podrían tener más efecto del que muchos imaginan. La combinación de crítica directa y apelación al voto como herramienta de defensa frente a lo que considera “injusticias profundas” busca llegar a un electorado golpeado por la inflación, la recesión y el desempleo.
A la militancia peronista y a los ciudadanos y ciudadanas de la provincia de Buenos Aires. pic.twitter.com/e0a3kGhh26
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) September 4, 2025