De la mano de un salario que para los trabajadores del sector registrado cayó un 5,2% desde noviembre del 2023, el consumo llegó a las elecciones legislativas con cinco meses consecutivos de caída.
En agosto el dato clave acerca del consumo masivo que publica todos los meses el Indec, las ventas en supermercados, mostró una baja del 0,2% mensual desestacionalizado y de esa forma el indicador acumuló un derrumbe del 3,6% desde marzo, en solo cinco meses. La Cámara Argentina de Comercio (CAC) ya adelantó que el deterioro del gasto de los hogares continuó en septiembre, con una contracción del 0,3% mensual.
El Indec publicó la Encuesta de Supermercados correspondiente a agosto. El informe muestra los números de las ventas en supermercados, un indicador que en agosto del 2025 estuvo un 9,6% por debajo de los niveles de noviembre del 2023, justo antes de la llegada del Gobierno. Además, el Indec registró una recuperación del 1% mensual en las ventas de autoservicios mayoristas durante agosto, aunque al comparar contra aquel noviembre del 2023 la baja fue del 21,6% desestacionalizado.
Un informe reciente de la consultora Equilibra remarcó en ese sentido: “Durante los casi dos años de la administración Milei, los asalariados privados y públicos registrados, y jubilados sufrieron, en promedio, una pérdida acumulada equivalente a dos meses de ingresos. Dicho de otro modo, durante los primeros 20 meses de la gestión Milei, resignaron el equivalente a 2,1 meses de ingresos”.
La consultora publicó sus estimaciones a partir de un informe llamado La raíz del desencanto y explicó: “La caída de los ingresos registrados fue generalizada, pero con diferencias sectoriales. Los empleados públicos y los jubilados fueron los más afectados, mientras que los asalariados privados formales lograron una recuperación plena. Cuando el análisis se realiza con el IPC basado en una canasta de gastos más actual —como la ENGHo 2017/18, que pondera más los servicios— la pérdida de los ingresos es 1,5 puntos porcentuales mayor respecto de la medición vigente del Indec. Además, la pérdida de ingresos fue mayor en el conurbano bonaerense que en el interior del país”.
Por su parte, la CAC publicó su indicador de consumo correspondiente a septiembre, que observó una contracción del 0,3% mensual y sumó a las dificultades de acceso al crédito, con la tasa de los préstamos personales en niveles promedio del 81,6% durante septiembre (y sin aflojar en lo que va de octubre): “El acceso al crédito se vio limitado por la volatilidad de las tasas de interés, y el consumo de bienes durables continúa creciendo, pero de forma cada vez menos intensa, aunque se espera que comience a estabilizarse después de las elecciones legislativas”.
En ese sentido, los últimos datos oficiales publicados por el BCRA reflejaron que los hogares están en un nivel de récord histórico de mora en sus pagos de tarjetas y, justamente, préstamos personales, un fenómenos de hecho explicado por la baja en el poder adquisitivo y por la supertasa. El nivel de irregularidad en los pagos fue del 6,7% en tarjetas de crédito, muy lejos del 4,9% que era récord hasta hace unos meses, ocurrido en julio del 2021. Para los préstamos personales llegó al 8,2%, inédito a nivel histórico, ya que el récord anterior había sido también durante agosto del 2021, llegando en aquel entonces a un 7,2%.