En una jornada marcada por los cruces ideológicos y las definiciones políticas, siete candidatos al Senado nacional por Salta participaron este lunes del “Salta Debate 2025”, realizado en la Escuela Normal. El eje principal fue el rol del Estado, tema que encendió el tono del encuentro y dejó en evidencia las diferencias entre los postulantes.
Flavia Royón, del espacio Primero los Salteños, planteó que el país enfrenta una falsa disyuntiva: “nos hacen elegir entre dos fracasos”. Propuso un Estado que brinde igualdad de oportunidades, moderno y transparente, con capacidad de cuidar a los salteños y regular el mercado.
Desde el Movimiento Socialista, Marcos Tognolini defendió la planificación democrática y un Estado activo que garantice necesidades básicas y fomente la producción. Apuntó contra los gobiernos anteriores por no haber logrado cambios reales.
El exgobernador Juan Manuel Urtubey, por Fuerza Patria, cuestionó duramente al modelo actual impulsado por Milei. Reivindicó una visión de Estado presente, con capacidad de generar desarrollo, como –según dijo– ocurrió durante su gestión provincial.
Claudio del Plá, del Frente de Izquierda, fue contundente: “El Estado está al servicio del capital”. Denunció que la actual crisis la pagan los trabajadores y reclamó un modelo completamente distinto, que rompa con la lógica de ajuste permanente.
En tanto, Francisco Rivas Vila, del espacio Renacer, criticó el uso del Estado como herramienta de negocios políticos. Denunció la falta de control fronterizo y se mostró escéptico ante las promesas de cualquier presidente. “Estoy cansado de esperar”, dijo.
Violeta Gil, de Política Obrera, evitó referirse directamente al eje central, pero cuestionó el endeudamiento de Salta y Nación, y cargó contra el gobernador Sáenz por su subordinación a políticas nacionales.
También participó Natalio Iglesia, de la UCR, quien defendió un modelo de Estado republicano, con controles y transparencia, y criticó el deterioro del federalismo bajo el gobierno actual.
Las ausencias de María Emilia Orozco, de La Libertad Avanza, y Sergio Leavy, del Partido de la Victoria, dejaron vacíos notables en un debate donde las posturas libertarias fueron fuertemente cuestionadas pero no defendidas.
Más allá de las diferencias, hubo un consenso implícito: el modelo de Estado promovido por Milei no satisface las demandas del interior del país, y mucho menos las de Salta. Los candidatos marcaron la necesidad de un Estado que equilibre las asimetrías regionales, garantice derechos y promueva desarrollo, sin caer en la burocracia ni el clientelismo.
Con las elecciones en el horizonte, este debate dejó en claro que el futuro del Estado argentino será uno de los temas centrales de campaña. Y en una provincia como Salta, donde las urgencias sociales son palpables, la discusión no es solo ideológica, sino profundamente territorial.