Un nuevo capítulo se abre en la extensa y sensible causa por la muerte de Alberto Nisman. El fiscal federal Eduardo Taiano pidió que la exfiscal Viviana Fein sea citada a indagatoria por su actuación en las primeras horas posteriores al hallazgo del cuerpo del entonces titular de la UFI-AMIA, ocurrido el 18 de enero de 2015. El pedido quedó plasmado en un extenso dictamen presentado ante el juez federal Julián Ercolini, quien deberá decidir si avanza o no con la convocatoria.
Fein, hoy jubilada, figura imputada en el expediente junto a otros funcionarios que intervinieron en la escena. Según el planteo de Taiano, se habrían cometido irregularidades graves durante las pericias iniciales en el departamento de la torre Le Parc, en Puerto Madero, donde apareció muerto Nisman un día antes de su presentación en el Congreso. Para el fiscal, la forma en que se manejó ese operativo afectó puntos clave de la investigación y dejó dudas que, a diez años del hecho, siguen sin resolverse por completo.
La responsabilidad de Fein está vinculada al modo en que se preservó —o en este caso, no se preservó— la escena. En ese momento, ella estaba a cargo de la fiscalía de instrucción que intervino de urgencia y tuvo el rol central de dirigir los primeros pasos de la investigación. Ahora, Taiano considera que existieron maniobras o decisiones que no fueron acordes a los protocolos y que podrían haber comprometido evidencia fundamental.
El dictamen que presentó Taiano supera las doscientas carillas y detalla punto por punto los elementos que respaldan su pedido. Allí se enumeran demoras en el ingreso de peritos, movimientos de objetos dentro del departamento, circulación de personas sin la debida autorización y una serie de omisiones que, según el fiscal, generaron un escenario de “descontrol” incompatible con una investigación de semejante importancia institucional.
La causa Nisman tuvo desde el inicio un alto impacto político y social en el país. Al momento de su muerte, el fiscal acababa de denunciar a la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner por presunto encubrimiento del atentado a la AMIA a través de la firma del Memorándum con Irán. Ese contexto, sumado a la complejidad del caso, puso bajo enorme presión a todos los actores involucrados en la pesquisa. Hoy, una década después, la Justicia sigue revisando aquellas primeras horas que marcaron el destino del expediente.
El planteo de Taiano llega en un momento clave, en un año en que la causa volvió a tener movimiento con nuevos informes y declaraciones. Para los investigadores, definir qué ocurrió en el departamento de Le Parc y cómo se manejaron las pericias iniciales es imprescindible para reconstruir con precisión el escenario. La figura de Fein vuelve a quedar así en el centro del debate, no ya por sus conclusiones de aquel entonces, sino por su participación operativa en el lugar.
En Salta, donde el caso Nisman siempre resonó fuerte por su impacto nacional, la novedad despertó nuevamente el interés en torno a uno de los expedientes más sensibles de la Justicia argentina. El pedido de indagatoria apunta a despejar dudas sobre decisiones que, con el paso del tiempo, se consideran determinantes para entender por qué la escena del crimen terminó señalada como desordenada y poco resguardada.
Ahora será el juez Julián Ercolini quien deberá evaluar si hace lugar al pedido y convoca a la exfiscal a declarar en calidad de imputada. De avanzar, será un paso significativo en una causa que, pese al tiempo transcurrido, continúa abierta y bajo permanente revisión. Para la Justicia federal, cerrar ese vacío inicial es fundamental para avanzar hacia la determinación final de qué ocurrió realmente en la muerte del fiscal Alberto Nisman.
