En medio del escándalo que atraviesa el Concejo Deliberante de Salta, este miércoles se hizo presente Pablo López, el edil denunciado penalmente por violencia de género, retención de haberes y presunta extorsión sexual. Aunque evitó dar declaraciones concretas sobre las acusaciones en su contra, se limitó a dejar una frase que generó repercusiones: "Tranquilos, el tiempo dirá todas las cosas".
López fue expulsado del espacio libertario días atrás, luego de que se conocieran audios comprometedores que formarían parte de la denuncia penal en su contra. Aun así, decidió presentarse a una reunión con la comisión investigadora, donde entregó un escrito para ejercer su derecho a defensa.
Al llegar al Concejo, fue abordado por periodistas. Sin embargo, su única respuesta fue: "Vengo a tener más derecho a presentar un escrito y a presentarme ante la comisión. No voy a dar más declaraciones que eso".
Respecto a los audios que circularon públicamente —y en los que se lo escucharía en situaciones comprometedoras—, el concejal no los negó ni confirmó su autenticidad. Solo dijo: "Los audios son públicos". Curiosamente, mientras él optó por no desmentir, su abogado sí lo hizo ante los medios.
También confirmó que presentó un descargo formal ante la comisión y que permanecerá en el recinto para seguir el procedimiento correspondiente. A pesar de la gravedad de las acusaciones, López evitó referirse a la causa judicial ni dio indicios sobre su continuidad en el cargo.
Cuando le consultaron si planea asumir su banca el próximo 10 de diciembre, cerró la conversación con una respuesta escueta que repitió varias veces: "No voy a dar declaraciones. Tranquilos, chicos, el tiempo dirá todas las cosas".
Mientras tanto, la comisión especial avanza con el análisis del caso para definir la situación institucional del edil, en medio de un fuerte malestar social y político por la gravedad de las denuncias.