El senador provincial Walter Wayar, en conversación con Agenda/Salta cuestionó la aprobación de la "ley antipiquetes" por considerarla anticonstitucional y perjudicial para los sectores más vulnerables de la sociedad. Destacó la importancia de respetar el derecho a la protesta y afirmó que la ley vulnera derechos fundamentales consagrados en la Constitución Nacional y tratados internacionales.
Wayar expresó su disconformidad con la denominación de "militantes" justicialistas a quienes en sus bancas legislativas votaron a favor de esta ley que penaliza la protesta social, señalando que muchos no comprenden el verdadero significado del peronismo. Además, advirtió sobre la creciente influencia de la antipolítica y los poderes económicos en la sociedad actual, lo cual se refleja en la aprobación de leyes que afectan a los sectores más postergados que luchan por sus derechos.
El senador argumentó que la ley es “anticonstitucional”, ya que tanto la Constitución Provincial como la Nacional y los Tratados Internacionales garantizan el derecho a la protesta y la manifestación. Si bien reconoció que las protestas pueden obstaculizar la libre circulación, Wayar subrayó la necesidad de analizar cualquier proyecto de ley en relación con el marco constitucional. Además, criticó la polarización que se generó al presentar el debate como un enfrentamiento entre el derecho a la libre circulación y el derecho a manifestarse.
En cuanto a la problemática socioeconómica, el senador cacheño resaltó las dificultades que enfrentan ciertos sectores de la sociedad, como la falta de acceso a la salud, la alimentación, la vivienda y la educación. En ese sentido, propuso establecer protocolos que permitan conciliar el derecho a manifestarse con la circulación de personas, teniendo en cuenta situaciones particulares como personas con problemas de salud o estudiantes que puedan perder exámenes. Asimismo, hizo hincapié en la importancia de evitar la violencia y promover el diálogo y el consenso.
Wayar también abordó la discusión sobre los salarios de los funcionarios políticos, destacando que reducirlos no solucionaría los problemas de los sectores más necesitados. En cambio, propuso una redistribución de la riqueza, donde los sectores más privilegiados aporten más para atender las necesidades de salud, seguridad y educación. Consideró importante debatir el tema de los sueldos, pero subrayó que esta medida no sería suficiente para resolver la problemática social.
“Pareciera que la dictadura fue hace doscientos años. No, no, fue hace cuarenta años. Los que tienen menos de cuarenta años no la vivieron, no la conocen, la sintieron, la leyeron, algunos se buscan informar, otros no. Pero quienes tenemos más de cuarenta años, sabemos lo que es la dictadura, y no tenemos que tener ningún sesgo cercano al totalitarismo, al autoritarismo, no los tenemos que tener, Entonces dejemos que los sectores que tienen derechos para defender, lo puedan hacer y busquemos la tolerancia en lo demás”, acusó el senador.
