La parroquia del Pilar, en el macrocentro de la ciudad de Salta, enfrenta un inusual brote de vandalismo que ha dejado consternada a la comunidad religiosa. El párroco Javier Mamaní, en conversación con Agenda/Salta, ha compartido detalles de estos actos de destrucción que ocurrieron en dos noches consecutivas.
El primer incidente tuvo lugar durante la madrugada del viernes al sábado, donde vándalos rompieron un vidrio y un cartel de vidrio, además de otro cartel de acrílico. Menos de 24 horas después, la parroquia fue nuevamente blanco de ataques en la madrugada del domingo, esta vez con daños más graves, incluyendo la rotura de ventanas, daños en la sala de horario y en el depósito. El padre Mamaní destacó que las mismas personas quedaron registradas en las cámaras de seguridad durante ambos incidentes. Aunque aún no se han determinado las edades exactas de los perpetradores, se observa claramente en los videos que se trata de adolescentes, probablemente menores de 20 años.
“La comunidad religiosa de la parroquia del Pilar se encuentra sorprendida y entristecida por estos actos vandálicos, que representan un nivel de vandalismo sin precedentes en la historia de la iglesia. Durante sus 78 años de existencia, la parroquia ha sido un punto emblemático para la comunidad local, y los daños sufridos en estos ataques han dejado a todos con una sensación de inseguridad”, expresó el sacerdote que además se mostró preocupado por la situación de inseguridad en el barrio más allá de la necesidad de proteger el templo y sus pertenencias, “que han sido construidas y mantenidas con esfuerzo y sacrificio a lo largo de las décadas”, dijo.
Respecto al caso, Mamaní explicó que la iglesia ha realizado denuncias formales a la policía, proporcionando todas las pruebas recopiladas, y espera que se tomen medidas adecuadas para identificar y responsabilizar a los responsables de estos hechos. La comunidad religiosa y la policía están trabajando juntas para esclarecer estos incidentes y prevenir futuros actos de vandalismo en la zona. En tanto que el padre Mamaní concluyó su entrevista enfatizando la importancia del respeto y la tolerancia en la sociedad, independientemente de las creencias y religiones, y expresó su esperanza de que estos actos de violencia no se repitan en el futuro.
