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ESCÁNDALO JUDICIAL

La Jueza del caso Maradona dijo que tenía permiso para grabar el documental y busca evitar su destitución

El gobernador Kicillof aún no acepta su renuncia.

La Jueza del caso Maradona dijo que tenía permiso para grabar el documental y busca evitar su destitución

Julieta Makintach, la jueza suspendida que integraba el tribunal del juicio por la muerte de Diego Maradona, presentó su descargo ante la Comisión Bicameral de Enjuiciamiento en un intento por evitar su destitución. En el escrito, sostuvo que contaba con el aval informal de sus superiores para participar en el documental Justicia Divina, y aseguró que existen pruebas —como chats y registros— que lo respaldan.

Mientras tanto, el futuro de la magistrada depende de una decisión política: si el gobernador Axel Kicillof acepta su renuncia presentada hace más de dos meses, el juicio político se frenaría. Pero si no hay respuesta en las próximas dos semanas, el proceso continuará y Makintach quedará obligada a enfrentar el jury que podría dejarla afuera del Poder Judicial.

La defensa, a cargo del abogado Darío Saldaño, niega cualquier irregularidad. Afirma que el tribunal estaba al tanto de las cámaras, que las grabaciones se realizaron en espacios públicos y que no se filtró ningún contenido sensible del juicio. También señala que la difusión de actos judiciales se enmarca en la transparencia del sistema republicano.

El documental se empezó a grabar incluso antes del inicio del juicio, con imágenes de Makintach en los pasillos del Palacio de Tribunales. Según el guionista, Juan Manuel “Chavo” D’Emilio, la idea era mostrar el proceso desde la mirada de una jueza, sin emitirlo hasta después del veredicto. Pero el proyecto se filtró en plena audiencia, generando un escándalo que terminó con la suspensión de Makintach, la anulación del juicio y el inicio de una causa penal.

Los denunciantes, entre ellos Fernando Burlando y Florencia Arietto, la acusan de mal desempeño, uso de recursos públicos y falta de imparcialidad. También hay investigaciones abiertas contra los otros dos jueces del tribunal, aunque por ahora no avanzaron.

Makintach, que asumió como jueza en 2017, fue apartada por tiempo indefinido y se le aplicó una quita del 40% de su salario. En paralelo, enfrenta una causa penal y cambió de defensa para ese proceso: ahora la representa el abogado Nicolás Urrutia.

Desde su entorno confían en que las acusaciones no son tan graves como se dijo al principio y que el descargo presentado podría frenar su caída. Pero si no hay una respuesta de Kicillof, el jury seguirá adelante.

Así, la jueza que debía juzgar uno de los casos más mediáticos del país terminó en el banquillo, enfrentando su propio juicio.


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