Durante una entrevista en el programa Nadie dice nada de Luzu TV, Ángela Torres dejó boquiabiertos a sus compañeros y seguidores al revelar un dato inesperado sobre su identidad. Con humor y espontaneidad, la actriz y cantante confesó que su apellido artístico no figura en su documento, y que lo mismo ocurre con su famoso tío, el cantante Diego Torres. “Este dato les va a cambiar la vida”, anticipó entre risas, antes de compartir la verdad detrás del apellido que la hizo conocida.
En realidad, el nombre completo de Ángela es Ángela Azul Concepción Caccia Currá. “Torres no lo tengo, es artístico, de mi abuela”, explicó, haciendo referencia a la icónica Lolita Torres, actriz y cantante que dejó una huella imborrable en la cultura argentina. “Yo muy pilla, ya a los once me colgué de las tetas de la abuela y dije que me iba a llamar Ángela Torres”, agregó con picardía, generando carcajadas en el estudio y una ola de reacciones en redes sociales.
La revelación no solo sorprendió por lo inesperado, sino también por lo que representa en términos de legado familiar. Lolita Torres, nacida en Avellaneda, fue una figura central del cine, la música y el teatro argentino durante más de cinco décadas. Su apellido, aunque no biológico para Ángela ni Diego, se convirtió en un símbolo de talento y tradición artística. Ambos decidieron adoptarlo como homenaje y como marca de identidad en sus carreras.
Diego Torres, cuyo nombre real es Diego Antonio Caccia, también lleva el apellido “Caccia” en su documento. Ángela explicó que “Caccia” es de origen italiano y que “Currá” proviene del lado materno. Esta mezcla de raíces y nombres refleja la historia de una familia profundamente ligada al arte, pero también a la reinvención personal.
