El conflicto entre Nicolás Occhiato y Telefe sorprendió al mundo del espectáculo argentino. Lo que parecía una relación cordial entre el canal líder de aire y el conductor que supo brillar en la pantalla con La Voz Argentina se quebró abruptamente tras sus declaraciones sobre los Martín Fierro al streaming, una gala organizada en conjunto por Telefe y Olga, el canal de Migue Granados.
El detonante fue un mensaje de Nico en sus redes sociales, donde pidió a su comunidad de Luzu TV que no gastara dinero en la votación de la categoría “Mejor Comunidad”. Según el formato impulsado por Olga y Telefe, los seguidores debían pagar para votar, lo que generaba ingresos para la ceremonia y ofrecía como incentivo un premio de cuatro millones de pesos en un sorteo. Sin embargo, Occhiato se plantó y dijo: “No gasten plata, nuestra comunidad no necesita esto”. Esa postura fue interpretada por los ejecutivos de Telefe como un boicot directo al modelo de negocio de la gala.
En programas como Intrusos, los periodistas Rodrigo Lussich y Adrián Pallares revelaron la interna: en Telefe consideran que Occhiato “está tirando de bombo la entrega porque la hace Olga”. Incluso trascendió que algunos directivos lo calificaron de “traidor” y “desagradecido”, ya que el conductor había tenido un lugar privilegiado en la pantalla del canal con La Voz Argentina. El enojo fue tan grande que desde la señal de las tres pelotitas dejaron filtrar su verdadero pensamiento: sienten que el creador de LUZU “nos tira a matar” y que su actitud atenta contra el futuro de la relación.
Este repudio no solo expone la tensión entre la televisión tradicional y el mundo del streaming, sino que también refleja la disputa por la legitimidad de las nuevas plataformas. Occhiato, como líder de Luzu TV, representa a una generación que prioriza la cercanía con su comunidad y rechaza mecanismos que impliquen un costo económico para los seguidores. Telefe, en cambio, defiende un modelo que busca monetizar la interacción del público, especialmente en eventos masivos como los Martín Fierro.
