La empresaria y conductora Wanda Nara regresó a la Argentina en medio de una nueva tormenta mediática que involucra a su exesposo, el futbolista Mauro Icardi, y un supuesto video íntimo que habría sido filtrado en redes sociales. Como es habitual en ella, Wanda no pasó desapercibida: al ser abordada por la prensa en el aeropuerto de Ezeiza, respondió con una frase que rápidamente se volvió viral y que muchos interpretaron como una indirecta cargada de ironía. “Creo que el lunes grabo una campaña de maní”, dijo con una sonrisa enigmática.
La elección del producto no fue casual. En redes sociales, el término “maní” comenzó a circular como parte de una burla hacia el tamaño del miembro de Icardi, luego de que la vedette uruguaya Natasha Rey asegurara haber recibido mensajes subidos de tono del jugador y compartiera capturas como “pruebas”. La frase de Wanda fue vista como una jugada maestra en el tablero mediático, donde cada palabra puede convertirse en titular.
Pero no fue la única en sumarse a la ola de ironías. Su ex, el cantante L-Gante, publicó una foto en la pileta con la frase “La vida que maní-feste”, otra clara alusión al escándalo. Incluso La China Suárez, quien en el pasado fue vinculada sentimentalmente con Icardi, compartió una imagen del supuesto chat y comentó: “Baby, la podrías haber aceptado”.
Wanda, por su parte, se mostró tranquila y segura. Negó haber filtrado el video y aseguró que no tiene ningún problema con que Telefe —canal con el que mantiene contrato— haya entrevistado a Icardi. “Hace tres años que Telefe me paga un sueldo. Yo les pasé el teléfono de mi ex, estaban buscando una camiseta. No tengo ningún problema”, aclaró. También fue consultada sobre la posibilidad de que La China aparezca en el canal, y respondió con diplomacia: “No me molesta. Cada uno se comporta como quiere”.
