Durante su participación en el programa Otro día perdido, conducido por Mario Pergolini, Federico Bal protagonizó uno de los momentos más comentados de la semana. En una entrevista distendida, el actor y conductor habló de su presente laboral, sus finanzas personales y su vínculo con su madre, la reconocida capocómica Carmen Barbieri. Fue en ese contexto donde lanzó una frase que dejó helado al conductor y generó una ola de reacciones: “Mi mamá es mi noviecita”.
La conversación comenzó con un tono relajado, cuando Pergolini le preguntó a Fede cómo manejaba sus gastos, considerando su estilo de vida nómade y su falta de apego al ahorro. Bal, sin filtros, reconoció que muchas veces se ve obligado a pedirle dinero a su madre para pagar las tarjetas de crédito. “Me da vergüenza, pero a veces le pido plata a mi vieja. Después se lo devuelvo, claro, pero hay meses que no llego”, confesó. Fue entonces cuando, al hablar del rol de Carmen en su vida, soltó la frase que desató la polémica: “Es mi noviecita, es mía y de nadie más”.
La reacción de Pergolini fue inmediata. Con su característico sarcasmo, le ofreció a Fede los servicios de su esposa y su hijo, ambos psicólogos, para que lo ayudaran a procesar esa relación tan simbiótica. “¿Estás seguro de lo que acabás de decir? Eso va a explotar en todos lados”, advirtió el conductor, visiblemente sorprendido.
Las redes sociales no tardaron en reaccionar. Mientras algunos usuarios tomaron la frase como una expresión exagerada de cariño filial, otros la consideraron inapropiada y hasta incómoda. El término “noviecita”, en este contexto, fue interpretado por muchos como una forma poco feliz de describir una relación madre-hijo, especialmente viniendo de una figura pública acostumbrada a generar titulares.
