El presidente Javier Milei se consolidó como la personalidad más influyente en redes sociales en Argentina, con más de 6 millones de seguidores en Instagram y casi 4 millones en X (ex Twitter), según un informe del Reuters Institute de la Universidad de Oxford. Su estilo directo y combativo lo convierte en un referente no solo en la política tradicional, sino también en el ecosistema digital, donde sus mensajes se replican sin intermediarios.
Detrás de Milei aparecen periodistas como Eduardo Feinmann, Jonatan Viale, Jorge Lanata y Luis Majul, vinculados a medios como TN, A24 y La Nación+. Feinmann se destaca con 1,1 millones de seguidores en X, mientras que Antonio Laje figura en el puesto 11. Sorprende la presencia de Jorge Lanata, fallecido a fines de 2024, que mantiene un alto nivel de menciones gracias a su programa Periodismo Para Todos en YouTube.
El informe también evidencia el crecimiento de creadores y referentes del sector libertario, con Alejandro Fantino entre los cinco primeros y figuras de TikTok y YouTube como Mate con Mote y Tipito Enojado captando audiencias jóvenes. Manuel Adorni, vocero presidencial, se posiciona entre los comunicadores con mayor alcance y engagement del último año, consolidando su influencia en la comunicación política digital.
Un dato relevante es la brecha de género: de las 15 figuras más mencionadas, 14 son hombres, y solo Yanina Latorre, centrada en espectáculos, logra ingresar al ranking.
Los medios digitales más referenciados incluyen TN, La Nación, Infobae, C5N, Telefe, Crónica y Clarín, además de plataformas online de A24 y TV Pública. La combinación de medios tradicionales y nuevos creadores refleja un panorama donde la política, la inmediatez y la exposición personal definen la agenda pública.
En Salta, la influencia de estas figuras también se siente en la interacción ciudadana en redes, donde los mensajes del presidente y los comunicadores nacionales generan debate y viralización dentro de comunidades locales. El estudio demuestra que hoy la comunicación y el poder se construyen tanto en la calle como en el terreno digital.