El pasado 3 de diciembre, Nicolás Cabré y Rocío Pardo sellaron su amor en una íntima ceremonia por civil realizada en Buenos Aires, rodeados de familiares y amigos cercanos. Entre los presentes estuvo Rufina, la hija que Cabré comparte con la actriz China Suárez, quien fue parte fundamental de la celebración. La pareja compartió en redes sociales un álbum con las mejores postales del día, desde la firma de la libreta hasta el primer beso como marido y mujer, acompañado por la frase: “03-12-25. Civil. Rodeados de amor”.
Lo que más llamó la atención de los seguidores no fue solo la felicidad de los recién casados, sino la reacción de la China Suárez. Desde Estambul, donde se encontraba por compromisos profesionales y personales, la actriz dejó un “me gusta” en la publicación de Cabré y Pardo, gesto que rápidamente se interpretó como una muestra de apoyo y madurez. En un contexto donde las exparejas suelen estar rodeadas de rumores y tensiones, la actitud de la China fue celebrada como un ejemplo de cordialidad y respeto.
La reacción generó un fuerte impacto en redes sociales. Miles de usuarios destacaron que la actriz eligió mostrarse alejada de cualquier polémica, priorizando la buena relación con el padre de su hija y con la nueva esposa de él. Aunque no dejó comentarios, su simple interacción fue suficiente para instalar el tema en la conversación pública. Para muchos, este gesto simboliza la importancia de mantener vínculos sanos cuando hay hijos de por medio, y la capacidad de dejar atrás viejas diferencias.
Por su parte, Nicolás Cabré y Rocío Pardo se mostraron felices y agradecidos por el cariño recibido. La pareja, que mantiene un perfil bajo, planea una gran fiesta de tres días en Córdoba para celebrar su unión con un círculo más amplio de amigos y colegas. Mientras tanto, el civil íntimo marcó un hito en su relación y reforzó la idea de que ambos prefieren vivir su amor lejos del ruido mediático.
