El pasado fin de semana, la noticia del infarto de Joaquín Levinton, cantante y líder de la banda Turf, generó una gran conmoción en el ambiente artístico y entre sus seguidores. El músico, de 50 años, debió ser internado de urgencia en el Hospital Fernández luego de sufrir un fuerte dolor en el pecho mientras se encontraba en un bar de Palermo. La rápida intervención de un mozo del lugar y del personal del SAME fue clave para que recibiera asistencia inmediata y pudiera ser trasladado al centro médico, donde se le practicaron estudios y tratamientos que lograron estabilizarlo.
Tras varios días de preocupación, Levinton reapareció en sus redes sociales con un video grabado desde el living de su casa. Allí confirmó que había recibido el alta médica y que se encontraba recuperándose favorablemente. Con un tono sereno, relató: “Tuve un infarto porque tenía una arteria tapada. De repente me empezó a doler el pecho y no podía respirar. Me ayudó un mozo del Timón, después llegó el SAME rapidísimo y me llevaron al Hospital Fernández. Les agradezco con todo el corazón lo genial que me atendieron”.
El músico también se mostró profundamente conmovido por el apoyo recibido: “Me emocionó mucho ver los mensajes que me enviaron”, dijo, destacando la cantidad de muestras de cariño que le llegaron tanto de colegas como de fanáticos. En sus palabras, se notó la gratitud hacia quienes se preocuparon por su salud y le enviaron fuerzas en un momento tan delicado.
El episodio encendió las alarmas en el mundo de la música, ya que Turf es una de las bandas más emblemáticas del rock argentino. Levinton, con su estilo irreverente y carismático, se convirtió en una figura central de la escena desde los años noventa. Por eso, su repentina internación generó un fuerte impacto en la comunidad artística, que rápidamente se solidarizó con él.
