En medio de una relación que no deja de generar titulares, Mauro Icardi volvió a encender las redes sociales con una publicación que mezcla sensualidad, provocación y una clara respuesta a sus detractores. Desde su mansión en Estambul, el delantero del Galatasaray compartió una imagen de la China Suárez saliendo de la pileta, empapada y luciendo una microbikini verde musgo con arandelas plateadas, acompañada por una frase que no pasó desapercibida: “Good morning. Wake up haters”.
La postal, tomada por el propio Icardi, muestra a la actriz en un momento íntimo y relajado, con el cabello mojado, bronceado parejo y gotas de agua cayendo por su cuerpo. La escena, lejos de ser casual, fue interpretada como una respuesta directa a los comentarios negativos que la pareja recibe desde que oficializaron su romance. En especial, muchos usuarios señalaron que el mensaje podría estar dirigido a Wanda Nara, exesposa del futbolista, quien recientemente fue acusada de manejar un “ejército de trolls” para hostigar a la actriz en redes sociales.
La frase elegida por Icardi no dejó lugar a dudas: fue una provocación calculada. En un contexto donde cada publicación se analiza como parte de una guerra silenciosa entre ex y actuales parejas, el gesto del delantero fue leído como una forma de marcar territorio. “Buenos días, haters” no solo es una expresión irónica, sino también una declaración de que, pese a las críticas, la pareja sigue firme y feliz.
Minutos después, la China Suárez reposteó la historia en su perfil, reforzando la complicidad entre ambos. En otra imagen, se la vio acostada al sol sobre una toalla de rayas, con actitud distendida y cero preocupaciones. El mensaje fue claro: están juntos, están bien, y no tienen intención de esconderse.