La entrevista de Maxi López en Sálvese Quien Pueda (SQP) se convirtió en uno de los momentos más comentados de la semana en el mundo del espectáculo y el deporte. El exfutbolista, que actualmente participa en MasterChef Celebrity, se mostró más abierto que nunca a hablar de su pasado turbulento con Wanda Nara y Mauro Icardi. Con un tono firme y sin filtros, López relató cómo vivió los años posteriores a su separación, en los que —según él— se le dificultó el contacto con sus tres hijos varones debido a las decisiones de su expareja.
En medio de la charla, López no dudó en apuntar directamente contra Icardi, con quien mantiene una enemistad pública desde que el delantero del Galatasaray inició su relación con Wanda. “Se merece un golpe”, lanzó Maxi, dejando en claro que aún persiste un resentimiento profundo hacia quien fuera su compañero en la Sampdoria y luego su rival en la vida personal. La frase resonó con fuerza en el estudio y rápidamente se viralizó en redes sociales, reavivando el recuerdo de la famosa “icardeada”, como se bautizó mediáticamente la relación entre Wanda e Icardi tras la ruptura con López.
El exfutbolista también acusó a su expareja de haber utilizado a sus hijos como herramienta de presión en medio de los conflictos. “Con Wanda metieron a los chicos para hacerme daño”, expresó, visiblemente molesto. Según López, durante varios años se sintió apartado de la vida cotidiana de sus hijos, lo que le generó un dolor profundo y una sensación de injusticia. Estas declaraciones se suman a las tensiones históricas que rodean a la familia, donde las denuncias cruzadas y los escándalos mediáticos han sido moneda corriente.
A lo largo de la entrevista, López intentó también diferenciarse de las acusaciones que en su momento Wanda había hecho en su contra, relacionadas con supuestos episodios de violencia. “Yo no le levantaría jamás una mano a uno de mis hijos, a una mujer, a nadie”, aclaró, buscando despejar cualquier duda sobre su conducta. De esta manera, el exjugador intentó reivindicar su imagen pública y remarcar que su lucha siempre estuvo centrada en recuperar el vínculo con sus hijos.
