Luisana Lopilato, reconocida actriz argentina con más de dos décadas de trayectoria, sorprendió recientemente al hacer una profunda autocrítica sobre su carrera artística. En el marco del encuentro Iberseries & Platino Industria 2025, celebrado en Madrid, la actriz reflexionó sobre su evolución profesional y personal, revelando aspectos de su pasado que hoy, desde una mirada más madura, no repetiría.
Con 38 años y una vida marcada por la actuación desde temprana edad, Lopilato se mostró sincera y emotiva al hablar de sus comienzos en producciones como Chiquititas, Rebelde Way y Casados con hijos. Aunque guarda un cariño especial por esos proyectos que la catapultaron a la fama, reconoció que hay escenas y personajes que, desde su perspectiva actual, no volvería a interpretar de la misma manera. “Hoy hay un montón de cosas que quizás no haría otra vez”, confesó, haciendo alusión a los cambios que ha vivido como mujer, madre y profesional.
Uno de los puntos que destacó fue la transformación de la industria audiovisual en cuanto al cuidado de niños y adolescentes en los sets. En ese sentido, valoró el entorno protegido en el que creció, gracias al acompañamiento de su familia y al equipo de Cris Morena, pero también subrayó que hoy existen mayores estándares de protección que permiten mirar hacia atrás con una visión crítica.
Además de su faceta como actriz, Lopilato se ha volcado en los últimos años a la producción ejecutiva, impulsada por el deseo de contar historias diferentes y salir de la zona de confort. “Me cansé de esperar a que me llamen para lo que yo quería hacer. Pensé: ¿por qué no puedo generar yo esos contenidos?”, expresó con determinación. Esta nueva etapa la llevó a participar en proyectos como Blue Box, un thriller canadiense, y Neisis, una película basada en la vida de Pepita la Pistolera, donde también asumió un rol detrás de cámara.