Luego de que se levantara el secreto de sumario en la causa iniciada por Viviana Canosa, la humorista y conductora Lizy Tagliani se expresó públicamente con firmeza y serenidad. En una entrevista televisiva, reafirmó su inocencia y pidió una disculpa directa, sin nombrar explícitamente a la periodista, pero dejando claro que se trata de alguien que la conoce profundamente.
La denuncia, que involucraba a varias figuras del espectáculo como Marley, Florencia Peña, Elizabeth Vernaci, Humberto Tortonese y Damián Betular, apuntaba a presuntos delitos graves, pero tras la apertura del expediente judicial se confirmó que no existen pruebas concretas contra ninguno de los mencionados.
En diálogo con el programa Sálvese quien pueda (América TV), Lizy fue clara: “Yo ya accioné judicialmente desde el primer momento, penal y civilmente. Lo mío es por difamación, injurias, calumnias”. Aseguró que nunca dudó de su posición porque conoce su historia y trayectoria, y porque, según sus palabras, quienes la acusaron también saben que están mintiendo.
“Siempre estuve segura de que no había nada, porque yo sé quién soy, y las personas que dijeron eso también saben quién soy”, expresó con convicción.
Más allá de la causa judicial, Lizy aprovechó el espacio para reflexionar sobre la responsabilidad de quienes trabajan en medios: “Tenemos que pensar qué es lo que vamos a decir, todos, eh. Los humoristas, las personas que trabajamos en televisión. Qué queremos y con qué pruebas denunciamos cuando denunciamos”.
Este llamado a la prudencia y al respeto por la verdad resonó en un contexto donde las denuncias mediáticas pueden tener consecuencias personales y profesionales devastadoras.