El miércoles 16 de julio, las redes sociales se encendieron con un nuevo escándalo protagonizado por Wanda Nara, quien mantuvo un tenso cruce con el periodista Gustavo Méndez y lanzó una explosiva acusación contra Eugenia “La China” Suárez. Todo comenzó con una publicación de Méndez en la red social X (ex Twitter), donde compartió la tapa de la revista ¡Hola! protagonizada por Wanda y deslizó comentarios sobre su separación de Mauro Icardi, lo que desató una catarata de respuestas por parte de la mediática.
Méndez, conocido por su cercanía con el entorno de Icardi y Suárez, escribió: “Ella lo dejó a él. ¿Recuerdan la imagen que subí llorando en el Chateau Libertador? Ahí le dijo ‘no te amo más’”. Además, agregó que “como todas las mujeres de los jugadores, es el precio de la fortuna y buena vida de los deportistas de elite”.
Wanda, que se encontraba de vacaciones en Villa La Angostura con sus cinco hijos, no tardó en responder. En un extenso hilo, desmintió las versiones del periodista y aseguró que jamás editó chats, que entregó su teléfono y sus claves a la Justicia, y que tiene pruebas de todo lo ocurrido en el Chateau Libertador, incluyendo cámaras de seguridad y testimonios de amigas.
En medio del cruce, Wanda apuntó directamente contra la China Suárez, sin nombrarla pero dejando claro a quién se refería: “Estoy esperando el chofer. Mientras te respondo a vos que trabajás de matarme y a tu entrevistada que pierde la dignidad dejando sus hijos para usar mis cosas, ropa y objetos en Turquía. Tengo pruebas de todo. Hasta cosas que nunca pude subir aún”.
La frase generó una ola de reacciones en redes sociales, donde usuarios debatieron sobre los límites de la exposición mediática, el rol de los hijos en los conflictos de pareja y la supuesta apropiación de objetos personales por parte de Suárez.
