Luego de pasar 28 días internado en terapia intensiva en el Hospital Mariano y Luciano de la Vega de Moreno, Thiago Medina, ex participante de Gran Hermano, volvió a mostrarse públicamente con una inesperada novedad: consiguió trabajo. Sin embargo, lejos de tratarse de una actividad tradicional, su nueva ocupación generó controversia. Thiago y Daniela Celis, madre de sus hijas y también ex GH, comenzaron a promocionar sorteos de celulares en sus redes sociales, lo que desató una ola de críticas por parte de sus seguidores.
El regreso de Thiago fue celebrado por muchos, especialmente por quienes siguieron de cerca su delicado estado de salud. Durante su internación, Daniela compartió el proceso con sus seguidores, revelando que el joven estuvo 21 días en coma inducido y que vivieron momentos de gran angustia. “Nunca en mi vida sentí tanto miedo”, confesó Celis en una transmisión reciente.
Sin embargo, la alegría por su recuperación se vio opacada por el tipo de contenido que eligieron para volver a la actividad pública. En sus cuentas de Instagram, ambos anunciaron el sorteo de un iPhone, con una consigna que generó malestar: los participantes debían seguir once perfiles distintos y comentar en la publicación. Muchos usuarios consideraron que se trataba de una estrategia invasiva y poco transparente, y apuntaron especialmente contra Daniela, apodada “Pestañela”, por su rol en la iniciativa.
“Gracias a todos ustedes por bancarnos. Ahora nos toca a nosotros devolverles un poco de todo el amor que nos mandan. Se va otro teléfono”, escribió Thiago en la publicación, intentando mostrar gratitud hacia sus seguidores. No obstante, los comentarios negativos no tardaron en aparecer, cuestionando la autenticidad del sorteo y el uso de su recuperación como plataforma para promocionar marcas.
Thiago Medina
Thiago Medina
