La Bombonera se prepara para un cambio histórico. Mientras los resultados deportivos no acompañan y el clima en el club se tensa, la dirigencia encabezada por Juan Román Riquelme busca devolverle la ilusión a los hinchas con una noticia que va más allá de lo futbolístico: ya comenzaron las reformas que marcarán el primer paso hacia la tan esperada ampliación del estadio.
Las primeras tareas apuntan a modernizar el acceso y la infraestructura exterior del estadio. Uno de los focos principales está en el ingreso de los equipos: el portón por donde entran los micros será completamente renovado. Además, la entrada principal de Brandsen 805 será más amplia y contará con una pantalla LED que dará la bienvenida con un estilo mucho más moderno.
Sobre la calle Irala, Boca instalará 16 ascensores nuevos para facilitar el acceso a las plateas media y alta. Los dos que ya existen en la Puerta 18 serán renovados y duplicados, totalizando cuatro elevadores en esa zona.
En la platea baja también habrá mejoras visibles: entre septiembre y octubre abrirá un nuevo patio de comidas, se renovarán los baños y se ensancharán los pasillos de circulación, lo que mejorará notablemente la comodidad para los hinchas en días de partido.
Otra novedad importante es la transformación del playón de estacionamiento. En septiembre se sumarán 400 nuevos espacios, y toda la superficie —que antes era de tierra— ya fue hormigonada. Además, se colocaron 200 reflectores nuevos para reforzar la iluminación, no solo durante los partidos sino también en la vida cotidiana del barrio.
Hard Rock en la Bombonera: un acuerdo internacional
Como parte del plan de modernización, Boca cerró un acuerdo con Hard Rock para abrir un restaurante dentro del estadio. La apertura está prevista para principios de 2026 y apunta a darle un perfil internacional a la Bombonera, atrayendo tanto al turismo como al público local. El restaurante será temático y buscará replicar el éxito que la cadena tiene en otras ciudades del mundo.
En paralelo con los cambios en La Boca, el club sigue invirtiendo en el predio de Ezeiza. Allí se construirán dos canchas de césped sintético, una de ellas techada, que estará destinada exclusivamente a las divisiones juveniles. Una apuesta clara al desarrollo a largo plazo del club.
El plan contempla una transformación profunda del estadio. Se demolerán las plateas y palcos ubicados sobre la calle Iberlucea para correr el campo de juego hacia las vías. Allí se construirá una nueva estructura que permitirá sumar hasta 27.000 lugares adicionales.
También se proyecta la construcción de 240 palcos con vista privilegiada, espacios interiores y balcones que darán a la calle. Actualmente, la Bombonera cuenta con solo 84 palcos. Además, las plateas preferenciales llegarán hasta el borde del campo de juego, ya que los bancos de suplentes se trasladarán a otra ubicación y se unificará el túnel de salida de los equipos.
Las tribunas populares también sufrirán modificaciones: se eliminarán los espacios vacíos en los córners y se suprimirá el túnel visitante en la tribuna Sur. Con estas obras, se podrán sumar hasta 10.000 nuevos lugares.
Por si fuera poco, se analiza la instalación de una pantalla LED de 360° dentro del estadio y la colocación de un techo completo sobre la tercera bandeja, algo que marcaría un antes y un después en la historia de la cancha.