Una intervención policial en Metán permitió demorar a una joven acusada de sustraer un teléfono celular de una vivienda ubicada en calle Lavalle, en plena zona urbana de la ciudad. El episodio, que generó alarma entre los vecinos del barrio Diógenes Zapata, fue advertido rápidamente gracias a un llamado al Sistema de Emergencias 911, lo que posibilitó que el personal de Infantería actuara en cuestión de minutos.
El procedimiento se inició cuando el propietario del domicilio afectado advirtió la falta del dispositivo y, tras sospechar un posible hurto, decidió comunicarse con la central de emergencias. Ese aviso activó el protocolo de búsqueda en la zona y permitió desplegar a los efectivos de la División Infantería, quienes patrullaron distintos pasajes y calles aledañas para localizar a la persona involucrada.
La sospechosa fue encontrada en el pasaje San Roque, a escasas cuadras del lugar del hecho. Según informaron fuentes policiales, la joven coincidía con las características aportadas por vecinos que vieron movimientos extraños en la zona momentos antes del llamado al 911. La rápida identificación permitió su demora y la recuperación del teléfono sustraído, que fue asegurado como elemento de prueba.
Este tipo de intervenciones se vienen realizando con frecuencia en distintos barrios de Metán, donde la Policía busca reforzar la presencia en las calles y acelerar los tiempos de respuesta ante delitos contra la propiedad. La articulación con el Sistema de Emergencias 911, sumado a recorridos preventivos, forma parte de una estrategia que apunta a disminuir hechos de robo y hurto en zonas residenciales.
En el caso de barrio Diógenes Zapata, los vecinos habían manifestado cierta preocupación por episodios de inseguridad registrados en los últimos meses, especialmente durante horarios nocturnos o momentos de baja circulación. La recuperación del teléfono fue valorada como un alivio por la familia damnificada, y también como un indicio de que el accionar policial puede resultar efectivo cuando la comunidad colabora con información oportuna.
Tras el procedimiento, la joven quedó a disposición de la Fiscalía Penal 1, que tomará declaración a las partes y analizará las circunstancias del hecho para determinar los pasos a seguir. La Justicia deberá establecer si existen antecedentes o si la imputada está vinculada a otros delitos similares en la zona.
La Policía, por su parte, continuará con los recorridos y controles habituales, reforzando la vigilancia en barrios donde se detecta mayor circulación de jóvenes involucrados en hechos contra la propiedad. Las autoridades insisten en la importancia de mantener comunicación permanente con el 911 ante cualquier situación sospechosa, ya que la inmediatez del aviso suele ser determinante para el éxito de los operativos.
Mientras avanza la investigación, el caso vuelve a poner en agenda la necesidad de fortalecer la prevención en los distintos municipios del sur salteño, una región donde los reclamos por seguridad y presencia policial se mantienen constantes. El procedimiento de Infantería en Diógenes Zapata demuestra que, cuando la comunidad y las fuerzas de seguridad actúan de manera coordinada, se pueden obtener resultados concretos y recuperar bienes que, en otro contexto, hubieran sido de difícil rastreo.