El enfrentamiento entre Alex Caniggia y Wanda Nara sumó un nuevo capítulo cargado de tensión y controversia. Luego de que la justicia desestimara una denuncia presentada por la conductora en febrero de este año, ahora se conoció que Wanda estaría evaluando iniciar una nueva demanda contra el mediático por sus recientes dichos ofensivos. Lejos de retractarse, Caniggia redobló la apuesta con una frase que generó repudio y debate: “Peppa Pig, volvé al establo”, escribió en sus redes sociales, comparando a Nara con el personaje infantil.
La disputa entre ambos se originó por una serie de comentarios que Alex realizó sobre el aspecto físico de Wanda, lo que ella consideró agraviante y fuera de lugar. Según reveló la periodista Laura Ubfal en el programa Storytime, la empresaria estaría decidida a llevar el caso nuevamente a la justicia, esta vez con el objetivo de obtener una compensación económica por los daños causados. “Quiere plata”, habría dicho Wanda a sus abogados, según Ubfal.
La reacción de Caniggia no tardó en llegar. En lugar de disculparse o bajar el tono, publicó una serie de mensajes cargados de ironía y provocación, reafirmando su postura y burlándose de la situación judicial. “Con tantos casos graves sin resolver, la Justicia debería tener cosas más importantes que hacer que perder el tiempo en esto”, escribió, minimizando el conflicto y cuestionando la decisión de Wanda de recurrir nuevamente a instancias legales.
Este tipo de enfrentamientos mediáticos plantea una pregunta clave: ¿cuál es el límite para la provocación en redes sociales? En un contexto donde las figuras públicas tienen millones de seguidores y sus palabras pueden generar impacto inmediato, el debate sobre la responsabilidad comunicacional cobra cada vez más relevancia. Mientras algunos defienden el estilo irreverente de Caniggia como parte de su personaje mediático, otros consideran que sus dichos cruzan la línea del respeto y la dignidad.