Julieta Poggio, ex participante de Gran Hermano y figura emergente del espectáculo argentino, se convirtió en tendencia tras una polémica declaración que generó un intenso debate en redes sociales. Durante una entrevista en el ciclo Mi Cielo, conducido por Mariano Iúdica para Infobae, la actriz fue consultada sobre qué pregunta nunca había hecho y le gustaría conocer la respuesta. Su reflexión derivó en una propuesta que muchos consideraron provocadora: “Hay que romper las iglesias para terminar con la pobreza”.
En el marco de una charla distendida, Poggio expresó su preocupación por la desigualdad social y el hambre en el mundo. “A mí me llama mucho la atención el tema de la pobreza y la desigualdad. Cómo el Vaticano está lleno de oro y de dinero, y la gente va a rezar ahí por los pobres. Cómo hay tanta gente pobre y no se puede repartir todo ese dinero, romper las iglesias y que se termine el hambre mundial”, dijo la influencer.
La frase fue rápidamente viralizada en redes sociales, generando una ola de reacciones. Mientras algunos usuarios defendieron su intención de visibilizar la desigualdad, otros la criticaron por lo que consideraron una falta de respeto hacia las instituciones religiosas y una simplificación de un problema complejo.
Más allá del impacto literal de sus palabras, muchos interpretaron la propuesta de Poggio como una metáfora sobre la redistribución de la riqueza acumulada por instituciones religiosas. El Vaticano, en particular, fue señalado por la actriz como un símbolo de opulencia en contraste con la pobreza global. “Es algo que no tiene explicación, debería haber alguna forma de poder equiparar todo eso”, concluyó.