La nueva temporada de La Voz Argentina no tardó en encender la pantalla con momentos de tensión, emoción y competencia feroz entre los coaches. En la última emisión, un joven participante desató un inesperado cruce entre dos de las figuras más queridas del jurado: Soledad Pastorutti y Lali Espósito. El motivo fue la disputa por Alan Lez, un talentoso cantante que interpretó “Prisionero” de Miranda! y logró que varias sillas giraran, incluyendo las de ambas artistas.
Desde el inicio, Soledad apostó fuerte: activó el bloqueo contra el dúo Miranda! también coaches del programa para asegurarse de que no pudieran sumar al joven a su equipo. Lo que no esperaba era que Lali también se diera vuelta, lo que transformó su jugada estratégica en una batalla directa con su colega.
Al terminar la performance, Lali agradeció con humor que Miranda! estuviera bloqueado, pero Soledad no se lo tomó tan liviano: “No, gracias no, ahora tengo que pelear... pensé que no te ibas a dar vuelta”, lanzó con una sonrisa tensa. Así comenzó un duelo verbal cargado de ironías, argumentos y promesas para convencer al participante.
Pastorutti apeló a la empatía y a romper con los prejuicios: “Siento que no tengo muchas chances, porque a lo mejor pensás que no podés, pero yo voy a pelear para que estés en mi equipo. La gente cree que soy estructurada, hay un preconcepto. Pues no, mi ciela, ayudame a demostrar que eso no es así”.
Lali, por su parte, respondió con firmeza: “Yo lo que veo en Sole es una desesperación lógica porque se gastó el bloqueo”. Y agregó: “Yo tengo la tranquilidad de que sé que este es tu equipo. No tengo que convencerte con nada tan extraño. Necesito que estés en este equipo, este año tenemos que salir campeones juntos”.
El momento más picante llegó cuando Lali, entre risas pero con tono desafiante, le dijo al participante: “¿Vas a decirme que no después de todo lo que te dije? ¡No me hagas sentir una estúpida!”. Soledad, lejos de achicarse, retrucó: “Yo también tengo mis armas, Lali. Acá cada una pelea por lo que quiere”. Finalmente, Alan eligió sumarse al equipo de Lali, que celebró con entusiasmo. Soledad, aunque decepcionada, se lo tomó con humor y reconoció que su bloqueo no dio el resultado esperado.