La noche del miércoles en MasterChef Celebrity fue una de las más emotivas y personales del certamen. Valentina Cervantes, modelo e influencer conocida por su relación con el futbolista Enzo Fernández, se destacó no solo por su plato, sino por abrir su corazón frente a las cámaras. Durante la visita de Wanda Nara a las estaciones de cocina, se dio una charla espontánea sobre el término “botinera”, tradicionalmente usado para referirse a las parejas de futbolistas, muchas veces con connotaciones peyorativas.
Ante la pregunta directa de Wanda, Valentina respondió con firmeza y naturalidad: “Y sí, soy, ¿o no?”, resignificando el término con orgullo. Lejos de rechazarlo, explicó que no le molesta ser identificada como botinera, ya que lo asocia con una parte importante de su vida y su vínculo con Enzo.
Esta postura fue celebrada por la conductora, quien también ha sido etiquetada de esa manera, y juntas reflexionaron sobre cómo la sociedad juzga a las mujeres por sus relaciones, sin considerar sus propios logros o identidades.
Pero el momento más conmovedor llegó cuando Valentina presentó su plato “Ruta camionera”, una receta inspirada en su papá, quien trabaja como camionero. El plato consistía en churrasquitos de bondiola, papas a la provenzal y huevo frito, una combinación que le recuerda a las comidas que compartía con su padre durante su infancia. Al explicar el origen del plato, Valentina no pudo contener las lágrimas: “Mi papá es camionero. Siempre lo veía en fotos viajando, comiendo en la ruta. Este plato es para él”.