Juventud Antoniana dejó escapar otra oportunidad valiosa en su camino por meterse en la próxima fase del Torneo Federal A. Este domingo, el equipo salteño empató 1 a 1 con San Martín de Formosa en el estadio Padre Martearena, en un encuentro correspondiente a la quinta fecha del nonagonal final de la Zona B. Con este resultado, los dirigidos por Martín Martos siguen sin despegar y la clasificación empieza a alejarse, justo en un tramo del campeonato donde no hay margen para el error.
El Santo tuvo un momento de ilusión cuando, a los 13 minutos del segundo tiempo, Mateo Mamaní abrió el marcador con una gran definición tras un pase filtrado de Berizvosky. Sin embargo, la alegría duró poco: apenas diez minutos después, el conjunto formoseño alcanzó el empate por intermedio de su goleador, Mauro Siergiejuk, quien no perdonó en el área y silenció a los hinchas antonianos.
Más allá del esfuerzo, Juventud no encontró la forma de vulnerar nuevamente el arco rival. Pese a que contó con algunas chances en el cierre del partido, falló en la puntada final y terminó sumando un punto que sabe a poco, sobre todo porque jugaba de local y ante un rival directo en la lucha por clasificar.
Un partido trabado y con poco juego
Desde el arranque se notó que el partido iba a ser más disputado que jugado. La primera etapa ofreció escasas emociones, con dos equipos que se estudiaron demasiado, priorizaron el orden y cometieron muchas imprecisiones en la mitad de la cancha. Juventud, con la obligación de ser protagonista por su condición de local y por su posición en la tabla, intentó asumir el rol ofensivo, pero le costó generar peligro real.
Martín Esparza fue uno de los pocos que se animó a probar desde afuera del área, aunque sin demasiada puntería. El planteo conservador de San Martín dejó poco espacio para maniobrar y el primer tiempo se fue sin mayores sobresaltos.
El gol de Mamaní y la reacción visitante
La historia cambió un poco en el complemento. A los 13 minutos, una buena jugada colectiva de Juventud terminó con un pase preciso de Berizvosky que dejó a Mamaní de cara al gol. El delantero controló y definió con categoría para romper el cero y encender la esperanza de los hinchas.
Pero la ventaja parcial no trajo tranquilidad. Lejos de replegarse, San Martín fue a buscar el empate con determinación. A los 23, tras una serie de rebotes, la pelota le quedó a Siergiejuk, que con un zurdazo cruzado venció la resistencia de Maino y marcó el 1 a 1 definitivo.
De ahí en más, el trámite se hizo más abierto. Juventud tuvo alguna chance con un cabezazo de Ibáñez que se fue cerca y un remate de Balvorín que exigió al arquero visitante. Sin embargo, la falta de claridad en los metros finales volvió a pasarle factura al equipo salteño, que no pudo volver a ponerse en ventaja.
Una situación incómoda y la presión que crece
El empate dejó a Juventud Antoniana con 5 puntos, estancado en el séptimo lugar de la Zona B. La tabla es ajustada, pero lo cierto es que los resultados no acompañan y el margen de error se achica. San Martín de Formosa, con 9 unidades, se mantiene en zona de clasificación junto a Gimnasia de Chivilcoy, lo que obliga al Santo a reaccionar de inmediato si quiere mantenerse con chances.
La única buena noticia para los dirigidos por Martos es que tienen un partido menos que sus rivales directos, lo cual les da una mínima ventaja matemática. Pero para que eso sirva, deben empezar a sumar de a tres, especialmente en condición de visitante, algo que les ha costado mucho en lo que va del certamen.
La próxima parada será clave: Juventud deberá visitar a Sportivo Belgrano en San Francisco, un rival complicado que también pelea por escalar en la tabla. El partido se presenta como una verdadera final anticipada, donde no hay margen para especular.
La necesidad de cambiar el chip
Más allá de los números, lo que empieza a preocupar en el mundo antoniano es la falta de regularidad y contundencia. El equipo muestra pasajes de buen fútbol, pero no logra sostenerlos ni traducirlos en victorias. La desconcentración en momentos clave y la falta de efectividad en el área rival han sido una constante a lo largo del torneo.
Los hinchas, siempre fieles, acompañaron en gran número en el Martearena, pero se fueron con gusto a poco. La expectativa por ver a Juventud en la próxima fase del Federal A todavía está viva, pero se necesita una reacción urgente para no quedar fuera de carrera antes de tiempo.
En Salta, el Torneo Federal A siempre despierta pasiones, y Juventud Antoniana es uno de los grandes protagonistas históricos. Sin embargo, este 2025 se presenta como un desafío particularmente complejo. Con un plantel renovado, un cuerpo técnico que busca identidad y un calendario que no da respiro, el equipo debe apelar a su historia y a su gente para revertir esta situación.