El joven futbolista salteño se mueve con la pilcha de la Selección allí en el mismo lugar donde lo hacen los campeones del mundo en Qatar, mientras sus amigos, compañeros, familiares y gran parte del fútbol salteño se regocijan siguiéndole los pasos en las redes sociales.
Mateo juega como enganche o extremo izquierdo en Argentinos Juniors, donde se destaca por su juego, su capacidad goleadora y sus asistencias. Estas cualidades hicieron que desde el cuerpo técnico de los seleccionados juveniles se fijaran en él.
Para la familia Rivero, la reciente convocatoria de Mateo al Sub 15 de Argentina no es solo un logro deportivo, sino la materialización de un profundo anhelo que comenzó en Salta.
Elías, padre de Mateo, expresó con profunda emoción el presente del pibe que se forjó en los potreros del fútbol local vistiendo la camiseta de San Antonio. “Es un sueño hecho realidad que solo Dios te lo hace experimentar y vivir, más que feliz y agradecido por todo lo que hizo, hace y va a seguir haciendo, solo hay que creer”, había posteado Elías ni bien se conoció la convocatoria de su hijo.
Mateo Rivero, en Argentinos Juniors
Mateo nació en Salta en abril de 2010, inició su camino en el fútbol a los 6 años en el club de “la villa”, donde ganó varios trofeos en torneos infantiles. Luego pasó por Juventud Antoniana (dos temporadas) y más tarde tuvo una prueba en River Plate. Actualmente, se desempeña en la octava división del bicho de la Paternal y usa la camiseta con el número 10 en su espalda. Recientemente, el 17 de mayo, Rivero anotó uno de los goles en la victoria de su equipo por 3 a 0 contra la octava de Belgrano de Córdoba.
Elías Rivero contó sobre la llegada de Mateo a Buenos Aires: “Vivimos acá desde que lo vio Argentinos prácticamete, desde 2021 cuando vino a una prueba que era por tres días”, recordó. El club lo quería incorporar a la pensión, pero Elías y su esposa Anahí no aceptaron. “Era muy chico, tenía 10 años”. Y antes de regresar a Salta surgió la propuesta para que toda la familia se instalara allá, en Buenos Aires.
Los Rivero hoy viven en un departamento en Villa Soldati, con la ayuda de Ezequiel Acosta, uno de los representantes que tiene Mateo. “Gracias a un amigo conseguí un trabajo y gracias a Dios estamos bien”, afirmó Elías. Cuando Mateo partió de Salta, Argentinos llegó a un acuerdo con Juventud Antoniana, club en el que estuvo un año.
Mateo River, a la Selección Sub-15
El martes 20 de mayo, la vida de Mateo dio otro giro importante. Era un día normal para el joven salteño que fue al club a entrenar, y allí le comunicaron la convocatoria a la Selección: se tenía que presentar al día siguiente por la tarde. Un colectivo de transporte para juveniles pasó a buscarlo junto a otros chicos. “Quedó impresionado por todo lo que vio, por el entrenamiento, la alimentación, el lugar, emocionado”, contó su padre.
El propio Mateo describió su sueño diciendo: “De verme en Salta jugando afuera de la casa, a verme hoy entrenando en el predio de la Selección”. Sí, es otro caso de sueño del pibe cumplido. Sus amigos de Ceferino tampoco lo pueden creer.
En el Sub-15 trabaja bajo la dirección técnica de Bernardo Romeo, otrora goleador de San Lorenzo, quien trabaja bajo la supervisión de Diego Placente, el DT de la Sub-20.
Luego de completar la primera semana de entrenamientos, Rivero volverá a la concentración el lunes para encarar un partido amistoso con los juveniles de Estados Unidos, en Ezeiza. La idea de Romeo y Placente es ir dándole forma al equipo que deberá jugar el Campeonato Sudamericano de la categoría el próximo año. Y dependerá mucho de Mateo seguir alimentando su sueño.
Fuente: el tribuno