En un contexto donde la oposición kirchnerista busca instalar un relato de abandono en materia sanitaria, los números oficiales revelan una realidad opuesta.
Desde 2024, el Gobierno de Javier Milei destinó más de $270.000 millones a medicamentos oncológicos para pacientes sin cobertura médica, atendiendo incluso casos que las provincias, especialmente Buenos Aires bajo la gestión de Axel Kicillof, rechazaron financiar.
El ministro de Salud de la Nación, Mario Lugones, salió al cruce de las acusaciones lanzadas por Facundo Lanza, funcionario del Ministerio de Seguridad bonaerense y referente kirchnerista. Lanza afirmó, sin pruebas, que “los tres Poderes del Estado están dejando morir a los pacientes”. Lugones desmintió categóricamente estas declaraciones y respaldó su respuesta con datos concretos.
Inversión récord en tratamientos oncológicos
Según los datos oficiales, en 2024 el Ministerio de Salud invirtió $115.000 millones en tratamientos oncológicos a través de la Dirección Nacional de Asistencia Directa y Compensatoria (DINADIC) y el Banco de Drogas Especiales. En lo que va de 2025, ya se ejecutaron $70.000 millones, con una proyección de $85.000 millones adicionales para el segundo semestre. Esto eleva la inversión total a más de $270.000 millones, una cifra histórica que refleja el compromiso del Gobierno nacional con la salud pública.
“Cuando las provincias, como Buenos Aires, rechazan por escrito financiar tratamientos oncológicos o de alto costo, la Nación interviene. Somos el último garante para que los pacientes accedan a los medicamentos que necesitan”, afirmó Lugones. Esta declaración pone en evidencia el rol clave del Estado nacional en la cobertura de casos críticos, especialmente aquellos que las administraciones provinciales no asumen.
Buenos Aires, en el centro de la polémica
La provincia de Buenos Aires, gobernada por Axel Kicillof, aparece como una de las principales responsables de los rechazos a solicitudes de tratamientos oncológicos. Según el Ministerio de Salud, muchos de los casos atendidos por la Nación fueron previamente desestimados por las autoridades bonaerenses. Este dato contrasta con el discurso kirchnerista, que insiste en acusar al Gobierno nacional de desatender a los pacientes.
Lugones fue tajante: “Los pedidos de medicamentos se inician en los Ministerios de Salud provinciales. Cuando una provincia dice ‘no’ a un tratamiento, el Gobierno nacional actúa para garantizar el acceso. No vamos a permitir que se juegue con la salud de la gente”.
Un esfuerzo nacional frente a la politización
Mientras el Gobierno de Milei canaliza recursos millonarios para garantizar tratamientos esenciales, desde el kirchnerismo se insiste en un relato de abandono que parece más orientado a generar confusión que a resolver problemas. Las acusaciones de Lanza, carentes de sustento, forman parte de una estrategia política que busca deslegitimar los esfuerzos del Ejecutivo nacional.
En este sentido, la inversión en salud no solo desmiente las críticas, sino que destaca el compromiso de la gestión actual con los sectores más vulnerables. Los $270.000 millones destinados a medicamentos oncológicos representan un esfuerzo sin precedentes para garantizar el acceso a tratamientos de alto costo, especialmente para pacientes sin obra social o prepaga.
El rol del Banco de Drogas Especiales
El Banco de Drogas Especiales, dependiente del Ministerio de Salud, juega un papel central en la distribución de medicamentos oncológicos. Este organismo asegura que los tratamientos lleguen a quienes los necesitan, incluso en casos de rechazo por parte de las provincias. En 2024, el Banco gestionó miles de solicitudes, priorizando la atención de pacientes en situación de vulnerabilidad.
La logística detrás de esta operación es compleja. Cada solicitud pasa por un proceso de evaluación que asegura la transparencia y la eficiencia en la entrega de medicamentos. Este sistema, fortalecido durante la gestión de Milei, permite que el Estado nacional actúe como respaldo ante las fallas de los sistemas provinciales.
La salud como prioridad en tiempos de crisis
En un contexto económico desafiante, el Gobierno nacional priorizó la salud como un eje clave de su gestión. La inversión de $270.000 millones en medicamentos oncológicos es solo una parte de un esfuerzo más amplio por fortalecer el sistema sanitario. Programas como el de la DINADIC y el Banco de Drogas Especiales demuestran que, lejos de abandonar a los pacientes, el Estado está comprometido con garantizar el acceso a tratamientos esenciales.
La respuesta de Lugones a las acusaciones kirchneristas no solo desarma el relato opositor, sino que pone en evidencia las falencias de algunas gestiones provinciales. Mientras el Gobierno nacional asume responsabilidades que no le corresponden directamente, el kirchnerismo parece más interesado en generar miedo que en aportar soluciones concretas.
Un mensaje claro: la salud no se negocia
La inversión récord en medicamentos oncológicos es una muestra del compromiso de la gestión de Milei con los argentinos que más lo necesitan. Frente a las críticas infundadas, los números hablan por sí solos: $270.000 millones destinados a salvar vidas, una cifra que desmiente cualquier relato de abandono y pone a la salud como prioridad.