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La recaudación cayó 9% en septiembre y el Gobierno evalúa nuevos recortes

La suspensión de retenciones al agro y la ausencia de ingresos extraordinarios provocaron una caída real de los recursos.

La recaudación cayó 9% en septiembre y el Gobierno evalúa nuevos recortes

La recaudación tributaria nacional registró en septiembre una caída del 9% en términos reales frente al mismo mes de 2024. Aunque nominalmente los ingresos sumaron $15,44 billones, el aumento interanual del 20,2% quedó muy por debajo de la inflación, lo que refleja una pérdida preocupante para las finanzas del Estado.

El retroceso se explica principalmente por dos factores: la decisión de suspender temporalmente las retenciones a las exportaciones del agro y la falta de ingresos excepcionales que sí habían impulsado los números del año anterior, como el blanqueo de capitales, la moratoria fiscal y el anticipo del impuesto a los Bienes Personales.

Ante este escenario, en la Casa Rosada ya se habla de profundizar el ajuste y avanzar con una nueva tanda de recortes en organismos públicos, a fin de contener el desequilibrio fiscal. La medida afectaría principalmente a dependencias estatales nacionales y programas con financiamiento centralizado.

El costo fiscal de las medidas al agro

Una de las causas centrales de la caída fue el retroceso de los Derechos de Exportación. Aunque la recaudación por este concepto llegó a $562.892 millones, apenas creció un 4,3% interanual. Descontando la inflación, implicó una baja real del 21%. El motivo: la eliminación transitoria de retenciones al sector agroexportador, aplicada con el objetivo de dar alivio a productores.

Si bien la medida fue bien recibida por el campo, su costo fiscal es cada vez más evidente. A esto se suma la caída del impuesto a los Bienes Personales, que aportó solo $97.228 millones, un desplome del 90,1% respecto al año anterior, cuando había ingresos extraordinarios por la regularización de activos no declarados.

Según estimaciones privadas, la pérdida real de recursos respecto a septiembre de 2024 fue de unos $1,5 billones, entre la eliminación del impuesto PAIS y la ausencia de los ingresos del régimen especial de Bienes Personales.

Ajuste en puerta

Con este panorama, el Gobierno nacional ya analiza un nuevo paquete de medidas de ajuste para compensar la caída de ingresos. Las alternativas en evaluación van desde la reestructuración de dependencias hasta el congelamiento de programas sociales y subsidios, además de una posible revisión de transferencias discrecionales a las provincias.

El objetivo oficial sigue siendo el equilibrio fiscal, pero con menos recursos disponibles y sin tributos extraordinarios en el horizonte, el camino se vuelve más empinado. La caída de la recaudación deja al descubierto los límites del esquema actual y acelera la necesidad de tomar decisiones.

Qué tributos sostuvieron los números

Pese a la baja general, algunos impuestos mantuvieron cierto dinamismo. El IVA lideró con $5,48 billones recaudados (+32%), seguido por el impuesto a las Ganancias con $2,92 billones (+35,7%) y los aportes a la Seguridad Social con $3,67 billones (+37,5%).

También hubo un crecimiento destacado en los Derechos de Importación, que sumaron $714.912 millones, con una suba interanual del 76,5%, gracias al salto del tipo de cambio y al mayor volumen de importaciones.

El impuesto a los combustibles recaudó $457.837 millones (+64,7%), impulsado por las actualizaciones aplicadas a lo largo del año. Estos tributos ayudaron a contener el desplome general, pero no alcanzaron a compensar la baja de los conceptos más golpeados.

Un cierre de año con señales negativas

Entre enero y septiembre, la recaudación total acumuló $134,8 billones, con una suba del 47,5% interanual. En términos reales, equivale al mismo nivel que en 2024, aunque sin el aporte del impuesto PAIS la variación habría sido positiva en apenas un 6,5%.

Con un contexto económico frágil, sin ingresos extraordinarios a la vista y con presión por sostener el gasto social, el desafío fiscal se agrava. El Gobierno apuesta a un mayor orden en las cuentas, pero las señales que dejó septiembre muestran que el margen de maniobra se achica.

En las próximas semanas podrían oficializarse nuevas medidas de ajuste, en línea con lo que ya se discute en los principales despachos oficiales. Lo que está claro es que el frente fiscal vuelve a ser un problema de peso para el cierre del año.

 


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