La tranquilidad del barrio 9 de Julio de Hipólito Yrigoyen se vio alterada anoche cuando un patrullaje de rutina derivó en el hallazgo de uno de los cargamentos de hoja de coca más grandes del último mes. Dentro de un automóvil estacionado en la vía pública, los efectivos encontraron bultos apilados que despertaron sospechas por su tamaño y peso.
Al revisar el vehículo, los policías confirmaron que se trataba de más de 250 kilos de hoja de coca, distribuidos en grandes bolsas cerradas, listas para su traslado. El operativo, enmarcado dentro del Plan de Protección Ciudadana, fue encabezado por personal de la Comisaría N°2 de Hipólito Yrigoyen.
En el lugar fueron identificados dos hombres, de 25 y 35 años, quienes no pudieron justificar la procedencia del producto ni acreditar la documentación del rodado. Ambos fueron infraccionados por violar el Código Aduanero, mientras que sus documentos de identidad fueron retenidos por presentar irregularidades legales.
El procedimiento fue supervisado por la Fiscalía Federal de Orán, que ordenó el secuestro del vehículo y de la carga, y contó con la colaboración de la Fiscalía Penal de Pichanal.
Según fuentes vinculadas a la investigación, la cantidad secuestrada equivale a más de 2.500 paquetes de hoja de coca listos para su comercialización, un valor significativo en el circuito informal del norte salteño.
En los últimos meses, los controles en la zona de frontera y en rutas provinciales se reforzaron debido al aumento de operativos similares. En muchos casos, la hoja de coca se transporta oculta en vehículos particulares o camiones de carga, sin pasar por los canales legales de importación.
“La lucha contra el contrabando de hoja de coca es permanente”, señalaron fuentes policiales, que destacaron el rol de los patrullajes preventivos para detectar cargamentos ilegales antes de que ingresen al circuito de distribución.