El triunfo de Javier Milei en las elecciones de medio término recorrió el mundo y generó amplia repercusión en la prensa internacional. Los principales medios coincidieron en calificar la victoria como “contundente” y “sorpresiva”, resaltando que el mapa argentino se tiñó de violeta tras un resultado que refuerza al presidente en la mitad de su mandato.
Luego de meses de tensión con el dólar, conflictos en el Congreso y una derrota en Buenos Aires, la recuperación electoral de Milei tomó por sorpresa a analistas y encuestadores. Su éxito fue interpretado fuera del país como un aval a las reformas que impulsa y un voto de confianza a su estilo de liderazgo.
En Estados Unidos, The New York Times presentó la elección como una victoria “crucial”, destacando el respaldo a su proyecto de dolarización y a la eliminación del Banco Central. The Washington Post subrayó que el mandatario logró “un Congreso más amigable”, lo que le permitiría avanzar con su agenda económica.
En Europa, El País de España habló de un mapa argentino teñido de morado y advirtió que Milei deberá evitar leer el resultado como un mandato absoluto. La Repubblica de Italia puso el foco en la reacción positiva de los mercados, aunque alertó sobre el costo social de las medidas. Le Monde de Francia, en cambio, expresó dudas sobre la dependencia del apoyo financiero de Estados Unidos.
El Financial Times y Reuters destacaron que la victoria fortaleció la confianza de los inversores y generó un repunte de los activos argentinos, mientras que en América Latina la mirada fue diversa. Folha de S.Paulo habló de un avance de la derecha radical en la región, y El País de Uruguay consideró el resultado como una “prueba crucial” para la segunda mitad del mandato.
La prensa internacional coincidió en que la elección no solo consolidó el poder político de Milei, sino que también abrió una nueva etapa para la Argentina. El desafío, señalaron, será mantener el respaldo popular mientras intenta sostener un programa económico que promete cambios profundos y que, por ahora, mantiene en vilo a la región y a los mercados.